Nicolau Casaus: "Sería espantoso que Alexanco volviera a vestir la camiseta azulgrana

Nicolau Casaus, vicepresidente primero del FC Barcelona, aseguró ayer: "Sería espantoso que José Ramón Alexanco volviera a vestir la camiseta azulgrana". El directivo matizó posteriormente está afirmación, realizada a tres periodistas durante el trayecto que une la ciudad holandesa de Arnhem con Amsterdam, diciendo: "La situación del jugador será estudiada en la próxima reunión del consejo directivo". Casaus señaló, por otra parte, que el capitán azulgrana, que ha puesto su contrato a disposición de la directiva, "nunca negó ni a nosostros ni a su esposa que hubiera tenido contactos sexuales con la empleada del hotel de Papendal" que le denunció por un presunto delito de violación.

La directiva azulgrana ha permanecido a la expectativa durante los seis días en que Alexanco ha estado acusado de un presunto delito de violación. Casaus, que fue el único dirigente que se desplazó a Arnhem, mantuvo desde el pasado sábado, fecha de su llegada a la localidad holandesa, una actitud muy distante respecto a todo el proceso que se seguía contra el jugador azulgrana. El vicepresidente barcelonista, que incluso tuvo que ser presionado por miembros del club para que permaneciera en Holanda, porque su intención era viajar el mismo lunes con los jugadores que han estado concentrados durante dos semanas en Papendal, se limitó a informar diariamente al presidente Josep Lluís Núñez de las gestiones que los abogados defensores realizaban para conseguir la libertad del capitán del Barcelona. "Núñez, desde Palma", dijo Casaus, "lo ha dirigido todo magníficamente".

Las chicas holandesas

Las declaraciones que ha realizado Casaus, después de que Alexanco abandonara la comisaría de Arhem, confirman que el central barcelonista, que hasta el momento tiene al entrenador Johan Cruyff como principal valedor, sigue siendo uno de los perseguidos por la directiva desde que dio lectura al comunicado en el que los jugadores pedían la dimisión de Núñez. El vicepresidente azulgrana afirmó ayer: "Sería espantoso que Alexanco volviera a vestir la camiseta azulgrana, porque en todos los campos de fútbol se crearía un ambiente horrible". Y, posteriormente, anunció que "él [Alexanco) no ha negado ni al club ni a su esposa que tuviera contactos con una chica", aunque en su opinión, Ias muchachas holandesas son diferentes de las españolas, son menos recatadas y pueden entrar en un vestuario mientras los jugadores se duchan".Casaus descartó, por otra parte, la posibilidad de acceder a la petición de los abogados defensores de Alexanco de presentar una contradenuncia por falso testimonio, "porque es mejor dejar, de una vez, el asunto". Finalmente, y tras asegurar que los honorarios de los abogados correrían a cuenta del club, se contradijo al anunciar primero que "la posibilidad de sancionar al jugador queda en manos del entrenador" y rectificar después: "Estudiaremos el caso en la próxima reunión de la junta".

Parte de la directiva pretende aprovechar ahora la decisión del jugador de poner su contrato a disposición del club para intentar depurarlo. "No quiero imaginarme cómo recibirían por esos campos a Alexanco", señaló otro dirigente azulgrana, "si jugara de titular, como parecía tener decidido el entrenador".

El apoyo incondicional que ha recibido Alexanco por parte de Johan Cruyff, que necesita a un jugador de sus características, y el de sus compañeros -Zubizarreta, Julio Alberto y Carrasco, por ejemplo, fueron a recibirle ayer por la mañana al aeropuerto de El Prat-, puede desencadenar un serio conflicto en el seno del club. El capitán azulgrana es consciente de que va "a ser protagonista durante mucho tiempo, cuando no me gusta estar en las portadas de la Prensa". "Pienso hablar con el entrenador", agregó, "y también con el presidente o con quien decida el club para aclarar la situación".Los periódicos holandeses, mientras tanto, se hacían eco ayer de la puesta en libertad de Alexanco sin entrar en demasiadas valoraciones, aunque en su mayoría dieron a entender que era improbable que el jugador no, hubiera tenido ninguna relación con su denunciante, cuya identidad sigue sin conocerse.

Las últimas informaciones, no confirmadas, apuntan que podría tratarse de una bella joven holandesa, de unos 18 años, que trabaja en una de las empresas de limpieza más importantes de Holanda. La denunciante no ha podido probar que existiera violencia física en su relación sexual con el central azulgrana, circunstancia que ha sido una de las claves para que el jugador haya sido puesto en libertad.