Un matrinionio payo acusa de agresión a tres familias gitanas en Aranjuez

El joven de 28 años C. L. C. y su esposa afirman que fueron agredidos por tres matrimonios gitanos, que les causaron heridas de diversa consideración. Los hechos se produjeron, según declaraciones de la familia, en la madrugada del 1 de agosto, cuando, al salir el joven a tirar la basura, se le acercó una muchacha en solicitud de dinero. Éste le entregó 100 pesetas y poco después seis personas de raza gitana se abalanzaron sobre él y sin mediar palabra le agredieron.En la comisaría de Aranjuez, el matrimonio payo, al denunciar el caso, aseguró desconocer el motivo de la agresión. Asimismo, se presentaron a declarar dos miembros de una de las familias gitanas, que aseguraron que el payo había hecho proposiciones deshonestas a la muchacha. La policía considera que hubo una simple pelea entre payos y gitanos, aunque se continúan realizando las diligencias sobre los hechos.

Hasta la fecha ésta ha sido la primera denuncia presentada por un payo por agresión de un gitano en la Casa Negra. Esta vivienda es el hogar de muchas familias gitanas, que la ocupan ilegalmente desde hace dos años. La casa, declarada en ruinas, es un peligro para los gitanos que la ocupan. Se encuentra en del casco histórico de la ciudad y los vecinos se han quejado en múltiples ocasiones ante la alcaldía y la comisaría afirmando que los gitanos viven en condiciones anti-higiénicas.

La policía, que ha intervenido en varias ocasiones para requisar a los gitanos aparatos electrónicos, reconoce que las condiciones higiénico-sanitarias de la vivienda son lamentables, puesto que se ven obligados a convivir animales y personas.

La madre del joven presuntamente agredido, J. C., está dispuesta a iniciar una campaña de recogida de firmas entre la población y presentarla ante la alcaldía para obligar a la institución a desalojar la Casa Negra. No obstante, el alcalde, el socialista Eduardo García, ya declaró en su momento que los gitanos de la Casa Negra serían trasladados a otras viviendas de los alrededores de la localidad.

En Aranjuez, donde siempre habían vivido gitanos sin mayores problemas con la comunidad paya, se vienen produciendo tensiones desde hace unos dos años. Varias familias gitanas, algunas de ellas presuntamente relacionadas con el tráfico de drogas, se asentaron entonces en el barrio de Moreras. Con alguna frecuencia se han producido reyertas, robos, y ocupaciones por la fuerza de pisos desocupados, deteriorando la convivencia entre gitanos y payos.