El Gobierno británico decide no adoptar las normas de la CE respecto al IVA
El Gobierno británico ha decidido mantener su vigente política sobre el impuesto sobre el valor añadido (IVA), sin adoptar los patrones de los demás países de la Comunidad Europea (CE) y en conflicto con lo pretendido por la Comisión Europea. "La decisión ya está tomada: no vamos a armonizar", ha declarado el ministro de Comercio e Industria, lord Young, a The Times.
Este punto es uno de los que han enfrentado al Gobierno de Margaret Thatcher con el relevado comisario de Mercado Interior, el británico lord Cockfield, que consideraba imprescindible para la viabilidad comercial de la Europa sin fronteras el establecimiento de una banda común para el IVA.Los británicos mantienen un gravamen único del 15% y dejan sin carga fiscal productos básicos, como los alimenticios, los derivados del petróleo, las, ropas de niños o la vivienda. Cockfield, entregado a la idea de la Europa sin fronteras, insistía en que tal Europa requería una armonización del IVA.
Su plan era crear un IVA regular que oscilase entre el 14% y el 19%. y un IVA para productos básicos que variase entre el 4%, y el 9%. Londres se negó repetidamente a modificar su tasa por considerar que no afectaba a la competitividad, y Young ha vuelto a insistir en ello, esta vez de un modo taxativo. El contencioso con el Reino Unido quedaría resuelto si sale adelante en el Parlamento Europeo hoy una enmienda que establece otra banda diferente, con un tipo alto de entre el 167. y el 22% y uno bajo que iría de cero al 6%-9%.
El Gobierno británico también ha decidido mantenerse firme ante quienes reclaman la desaparición de los controles fronterizos e insiste en que tales controles son necesarios para luchar contra el tráfico de drogas o contra el terrorismo. Young mantiene que estas medidas no significan que su Gobierno no crea en la idea de Europa, pero advierte que la cautela debe animar toda acción encaminada a la Europa de 1992 y después.
