Un muerto y 16 heridos en la fiesta del Carmen de Santander

Un muerto y 16 heridos de diversa consideración, entre ellos una niña por cuya vida se teme, es el resultado de la explosión de un número indeterminado de cohetes a bordo del barco Nuestra Señora del Carmen, en el poblado pesquero de esta capital, cuando tenía lugar la celebración de las fiestas del Carmen, patrona de los pescadores, y en ellas participaban en tierra y mar centenares de vecinos. Varias personas, debido a la onda expansiva, fueron lanzadas al agua, y otras lo hicieron presas de pánico. Una general confusión se expandió a bordo de las embarcaciones cercanas y en los muelles.

Minutos antes de las dos de la tarde numerosas personas se encontraban a bordo del pesquero Nuestra Señora del Carmen de San Ciprián, entre las cuales algunos jóvenes procedían a hacer estallar los cohetes situados en cubierta. Inesperadamente, a causa de una chispa y tal vez también por simpatía, el paquete de bombas de artificio estalló.Inmediatamente se tuvo la certeza de que entre los embarcados en el Nuestra Señora del Carmen había numerosos heridos, procediéndose a su evacuación. Félix Muñoz Fernández, de 28 años, resultó muerto, mientras su hija, Mercedes Muñoz Santamaría, de cuatro meses, que tenía en brazos, era trasladada en muy grave estado a la residencia Cantabria, donde a media tarde quedó en la unidad de cuidados intensivos tras haberle sido diagnosticado trauma craneal y de tórax, contusión pulmonar y shock.

Muchos niños heridos

Entre los heridos figuran numerosos niños con edades comprendidas entre tres y 13 años, así como varios adultos, que fueron alcanzados por los efectos del estallido, que, según declararon varios testigos, fue "terrible". Diversos destrozos materiales causó la explosión en el barco, en cuya cabina podía verse un considerable boquete. Algunos de los heridos fueron lados de alta en las horas inmediatas al suceso.Las fiestas del Carmen, muy populares en toda la barriada donde se asienta el poblado pesquero y que gozan de gran tradición en Santander, quedaron inmediatamente suspendidas por voluntad de sus habitantes. Asimismo, la Comandancia de Marina, que, honraba por su parte honraba a la Virgen del Carmen, su patrona, con diversas celebraciones, tomó idéntica decisión.