Cárdenas, virtual triunfador en la capital mexicana
El virtual presidente de México, Carlos Salinas de Gortari, reconoció ayer que la oposición ha obtenido la victoria en las elecciones del miércoles en varias regiones del país, y anunció el comienzo de "una nueva etapa política" en la vida de la nación. Fuentes oficiales del Partido Revolucionario Institucional (PRI) adelantaron antes de conocerse los resultados oficiales que Salinas había salido vencedor, probablemente, sin alcanzar la mayoría absoluta, y que Cuauhtémoc Cárdenas ha obtenido el triunfo en la capital del país, donde reside casi una cuarta parte del total de la población mexicana.
Más de 20 horas después del cierre de las urnas y cuando todavía no se conocían los resultados que escruta la Comisión Electoral, Carlos Salinas, el candidato del PRI, se atribuyó la victoria en las que calificó como "las elecciones más competidas de la historia y también las más pacíficas". Dijo que su triunfo había sido "indudable y evidente", pero le reconoció a la oposición "más triunfos de los que había obtenido anteriormente".Salinas afirmó que "la información permite observar que las oposiciones muestran fuerza mayoritaria en varios distritos del país". "Es la nueva realidad política", señaló, "y con la cual habremos de convivir de manera armónica y respetuosa."
Sobre 1.100 mesas de votación escrutadas en distintos lugares del país, que representan algo más de 230.000 votos, el PRI obtuvo el 43%, el Frente Democrático Nacional (FDN) de Cárdenas un 36,8%, y el Partido de Acción Nacional (PAN), un 17%. Estos datos no son todavía oficiales y no son suficientemente representativos de un censo de 38 millones de personas, pero, de confirmarse, constituirían un verdadera revolución electoral.
Nueva etapa política
En su primera aparición pública desde la jornada electoral del miércoles, el candidato del PRI aseguró: "Esta expresión de pluralidad es una muestra del avance democrático de México y así lo reconozco. Termina la época de partido prácticamente único y entramos en una nueva etapa política en la vida del país, con partido mayoritario y muy intensa competencia de la oposición". Salinas señaló, por último, que defenderá las victorias que obtenga su partido tanto como las que alcance la oposición. "Por mi profunda convicción democrática y por la unidad y el bien de la nación". El PRI ha afirmado que no quiere adelantar cifras y que esperará a conocer los resultados oficiales.
Fuentes de todo crédito de este partido reconocieron, sin embargo, que disponen de indicaciones que muestran que los candidatos de Cárdenas han ganado en la capital mexicana y el Estado de Michoacán, donde nació el general Lázaro Cárdenas, y que es muy probable que alcancen también el triunfo en el Estado de Morelos.
Uno de los partidos que respalda la candidatura de Cárdenas, el Partido Mexicano Socialista (PMS), adelantó ayer cifras particulares que dan al candidato del FDN la victoria en el total del país con el 39% de los votos. Según el PMS, Cárdenas obtuvo el 44.4% de los votos de 1484 mesas electorales de la capital mexicana, que supone el 20%. de las instaladas en la urbe.
Cuauhtémoc Cárdenas, sin embargo, se mostró cauteloso, no quiso declararse vencedor e indicó que se encuentra a espera de conocer los datos de sus propios colaboradores de la corriente democrática y de cotejarlos con los de la Comisión Electoral. A pesar de ello, manifestó que los resultados preliminares muestran una tendencia favorable a su candidatura en diversos distritos electorales de México.
El candidato del PRI al Senado, Joaquín Gamboa, parece, según todos los indicios, haber sido derrotado a manos del ideólogo del neocardenismo, Porfirio Muñoz Ledo. Gamboa es un dirigente obrero multimillonario que había sido impuesto en las listas de Salinas por la Confederación de Trabajadores Mexicanos (CTM). El líder de este sindicato, el octogenario Miguel Velázquez, no asistió ayer al acto en el que Salinas anunció su victoria, aunque si estuvo la noche anterior en el discurso en el que el presidente del PRI, Jorge de la Vega, anunció que su partido había obtenido un triunfo "contundente".
Después de una noche de incertidumbre en la que los reformistas y los conservadores del PRI disputaron sobre la táctica a emplear ante el evidente avance electoral de la oposición, parece haberse impuesto la línea de cambio que representa Carlos Salinas.
Una fuente muy próxima comentó ayer que la posición adoptada por Salinas significa "el cumplimiento de un compromiso que el candidato sostuvo desde el primer día de la campaña para demostrar que la modernización es viable, incluso en contra de electores dentro del propio partido que ven con reserva, este proyecto". Para México, según esta misma fuente, la decisión de Salinas de respetar los resultados "le va a dar a la sociedad nueva confianza en su Gobierno".
Gobierno y oposición coincidieron, sin embargo, en que estas han sido las elecciones con mayor índice de participación en toda la historia del país, correspondiendo a la enorme expectación que habían suscitado. Cárdenas informó de una "muy importante participación electoral".
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