La mejora comercial favorece al dólar y a Wall Street

El Departamento de Comercio norteamericano publicó ayer un déficit comercial para el mes de marzo de 9.750 millones de dólares, frente a 13.830 millones en febrero, registrando las exportaciones un aumento del 23% y las importaciones un 3,6%. Las exportaciones de los EE UU a Japón se incrementaron en 39,7%, mientras que a la inversa, es decir, las exportaciones de Japón a Estados Unidos, descendieron un 1,2%. Asimismo las exportaciones japonesas de automóvil a los EE UU descendieron un 22,9%.El déficit publicado es el menor desde marzo de 1985. La noticia sorprendió a operadores, analistas e inversores, cuya expectativa más optimista situaba el déficit en tomo a los 12.000 millones de dólares, informa Shearson Lehman Hutton. La reacción fue inicialmente alcista para todos los mercados y en especial para el dólar, que pasé de 1,6830 a 1,7090 frente al marco.

La bolsa, al igual que los bonos, registraba alzas importante a la apertura. Sin embargo, la euforia inicial duró poco tiempo y dio paso a temores cada vez mayores respecto a la inflación. El fuerte crecimiento de las exportaciones junto a noticias anteriores como el desempleo, en el nivel más bajo desde 1974, o el índice de precios del Commodity Research Bureau, hace prever a muchos inversores que la Reserva Federal se verá obligada a elevar aún más los tipos de interés. Empeorando la situación, se dio a conocer el nivel de utilización industrial que se situó en abril al 82,7% frente al 82,4% anterior en marzo.

Por otra parte, el representante de comercio norteamericano, Yeutter, si bien celebró la noticia, también declaró que el déficit aún era excesivamente grande. En este contexto, el dólar se limitó a conservar las ganancias de la apertura permaneciendo toda la sesión en torno a 1,7090 marcos. En Londres, la bolsa registró alzas moderadas gracias a las noticias provinientes de EE UU y al recorte de las tasas básicas británicas del 8% al 7,5%, recorte diseñado con el único objetivo de debilitar la cotización de la libra esterlina. Los efectos fueron inmediatos, bajando la cotización de la moneda británica a 3,18 marcos a 3,1550.

Ayer, tres de los cuatro bancos británicos más importantes redujeron sus tasas de interés, del 8% al 7,5%. El Midland, el Barclays y el National Westminster siguieron las instrucciones del Banco de Inglaterra, lo que se considera como un triunfo del ministro de Hacienda sobre la primera ministra.