Ligero aprobado a la gestión

El sondeo más reciente del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) sobre el impacto de la autonomía entre los ciudadanos del País Valenciano no pasa de otorgarle al Consell un ligero aprobado en su gestión. En un índice de cero a 10, la calificación pública otorgada a la labor del Gobierno autónomo era del 5,27 en diciembre de 1987.

El 81 % de los encuestados conocía el nombre del presidente, Joan Lerma, aunque su valoración no pasaba del 5,9. Sobre la situación general de la comunidad autónoma, la calificación pública media en noviembre de 1987 era de un 5,2 con tendencia al alza.

También se experimenta un interés creciente en los asuntos relacionados con las instituciones autonómicas. Un 36% de los encuestados decía tener "un buen nivel de información" en diciembre de 1987, frente al 12%. registrado en octubre de 1984.

Por el contrario, aumenta el número de personas que creen en posibles agravios comparativos entre las tres provincias, como consecuencia de la entrada en vigor del estatuto. Casi la mitad de los encuestados se muestran convencidos de que la autonomía no beneficia a todos por igual, frente al 52% que afirma lo contrario. Este porcentaje era menor (el 45%) en 1985.

Respecto del uso del valenciano, el 41 % afirma que se habla "más que antes", frente a un 7% que opina lo contrario y otro 48% que considera que se habla igual que antes.

Desconocimiento

Frente a la posición del PSOE, que esgrime un balance positivo respecto del impacto de la autonomía, los grupos de oposición discrepan. El portavoz del Grupo Mixto (Unitat del Poble Valencià) en el Parlamento autónomo, Pere Mayor, afirma que existe "un gran desconocimiento de nuestras instituciones autonómicas. El ciudadano mete en el mismo paquete a las Cortes y al Consell".Pedro Zamora, de Izquierda Unida, sostiene que la autonomía "se conoce muy insuficientemente; una parte importante de ciudadanos ignora las competencias y las exigencias que ha de tener la Administración autonómica".

Manuel Campillos, de Unión Valenciana, está convencido de que la autonomía no ha calado en el pueblo valenciano y esto es por culpa del Gobierno autónomo, que actúa como correa de transmisión del Gobierno central".

Luis Gil-Orozco, del CDS, también opina que el ciudada no "no se ha percatado suficientemente de los beneficios que le reporta la autonomía". Rita Barberá, de AP, afirma que ha denunciado repetidas veces que ésta "no ha sido respetada por el Gobierno de la nación ni por el Consell" y pone el ejemplo el paso de los cítricos marroquíes por tern torio español como "un acto de difícil explicación para los ciudadanos".