La Asamblea Legislativa panameña levanta el estado de emergencia
La Asamblea Legislativa de Panamá mediante un acuerdo de las bancadas gubernamental y opositora, levantó el estado de emergencia nacional que regla desde el 18 de marzo, en una decisión que busca allanar el camino de la negociación política. Ante el fracaso del arzobispo de Panamá, Marcos McGrath, en su intento de mediación entre los sectores en pugna, fuentes extraoficiales asisten en que el obispo vasco español José Sebastián, nuncio apostólico, ha tomado la batuta para lograr una negociación entre el Gobierno y la oposición.
Aunque reconoce que persisten las causas que obligaron al presidente Manuel Solís Palma a declararlo, la Asamblea Legislativa sostiene que el levantamiento del estado de urgencia, crea un clima que favorece la discusión y el diálogo entre las fuerzas políticas de este país.El Gobierno implantó el estado de urgencia, con efectos más bien de carácter psicológico y sin suspender formalmente las garantías constitucionales, ante el asedio económico por parte de la Administración de Reagan y dos semanas después ole que un juez federal de Nueva York congelara los fondos del Banco Nacional panameño (con funciones de banco central), acción que provocó la actual escasez de moneda circulante y que ha minado la economía panameña, en un 70% dedicada a los servicios.
Dentro de la asfixiante: situación económica, Panamá vive un momento de distensión propicio para intentar un diálogo, con mediación eclesiástica. El Gobierno alienta una negociación "sin precondiciones" y sin que signifique la "rendición" -como dijo ayer mismo Solís Palma- y la oposición recalca que sólo concurrirá a un diálogo que incluya como tema número uno la destitución, y salida del país del general Noriega.
El nuncio apostólico, que goza de simpatías y amistades -dentro de ambos bandos, ha relevado, con sus gestiones hasta ahora secretas, el papel mediador propuesto a McGrath a finales de marzo- por el presidente de Costa Rica, Oscar Arias, y el presidente del Gobierno español, Felipe González.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
¿Tienes una suscripción de empresa? Accede aquí para contratar más cuentas.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
Archivado En
Últimas noticias
La defensora del lector responde a las dudas y críticas más frecuentes de los lectores y oyentes de EL PAÍS en 2025
Navidad en el límite de la ‘zona de muerte’ de Ucrania
Maratón navideño de Rob Reiner como antídoto frente al autoritarismo de Trump
Regalos sin envoltorio: tres experiencias que dar (y vivir) en Madrid este invierno
Lo más visto
- Víctor Bermúdez, profesor de Filosofía: “Hemos perdido el control del proceso educativo, lo que damos en clase es en gran medida un simulacro”
- Zelenski confirma que cualquier pacto con Rusia deberá ser ratificado en referéndum
- La revalorización de las pensiones queda en el aire por la negativa de la derecha a apoyar otras medidas sociales
- “Un jardín con casa, no una casa con jardín”: así es la premiada vivienda de 146 metros cuadrados que se camufla con la vegetación
- TVE se reivindica (con pulla) en su gran noche televisiva




























































