Ingenio español
Pretender, aestas alturas, hacer una cuestión de Estado de un simple hecho doméstico, cola incluida, es una acción peregrina a la que tan acostumbrados estamos los habitantes de la península Ibérica. Ni siquiera cabe el sentido del humor.
Si ya no permitimos el paso a nuestros máximos dirigentes, apaga y vámonos. Entonemos, entonces, la copla del maestro Carlos Cano. Música y política vacacional. En todo caso, «es dificil entender a aquellos que siguen la política de esperar y ver o a aquellos que, en realidad, no hacen nada o no cambian nada".-
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