La campaña de EE UU contra Noriega es un "asesinato moral", según Juan Bosch

Juan Bosch, ex presidente de la República Dominicana, calificó de "asesinato moral para acabar con el líder del independentismo" la ofensiva desencadenada por Estados Unidos contra el jefe de las Fuerzas de Defensa de Panamá, general Manuel Antonio Noriega. En unas declaraciones a EL PAÍS durante su estancia en Madrid, Bosch afirmó que el hombre fuerte panameño "no es un nacionalista improvisado", sino que esa convicción "viene de muy lejos". No cree que vaya a producirse una intervención militar de EE UU en el país del canal ni que la actual crisis tenga una solución hasta que el presidente Ronald Reagan deje la Casa Blanca.

Bosch fue apartado de la presidencia dominicana en 1963 por un golpe militar cuya inspiración fue adjudicada a la Embajada de EE UU en Santo Domingo. También fueron los norteamericanos, Washington envió a la isla 40.000 marines quienes impidieron su retorno al poder cuando un movimiento militar intentó auparle de nuevo en la jefatura del Estado.Este veterano político de casi 79 años de edad, escritor y ensayista autodidacta, que dirige el Partido de la Liberación Dominicana -principal fuerza de la oposición-, ha viajado en numerosas ocasiones a Panamá. Rechaza que pueda establecerse un paralelismo entre el país del canal y la referida situación que le tocó a él vivir mediada la década de los años sesenta en la isla caribefia.

"En Panamá no habrá una intervención militar nortearnericana directa, sería demasiado torpe. Lo que buscan los norteamericanos es colocar al frente del Ejército a un hombre que siga sus intereses", dice Bosch, para quien el objetivo final de Washington es mantener sus tropas en la zona del canal. "Pariamá", dice, "es un país en el que la quinta parte de su territorio es de hecho un Estado de EE UU y en la que Washington mantiene un Ejército de ocupación".

Líder de la independencia

Bosch no cree que las negociaciones a través de la mediación de la Iglesia panameña vayan a desembocar en el abandono del rriando militar por parte del general Manuel Antonio Noriega. "No habrá ninguna negociación que implique su salida. El que el Gobierno haya aceptado tales conversaciones es una medida tcáctica para que al general no se le pueda acusar de persona intransigente", afirmó, para añadir que Noriega es "el líder incuestionable de todos los panameños que luchan por la independencia de su país y de los militares".Recuerda que cuando el general Omar Torrijos, artífice de los acuerdos con Estados Unidos para la recuperación por Panamá de la zona del canal, realizó su primer viaje al exterior y se encontraba en México, hubo un levantamiento militar contra el líder panameño, y que en el momento en que todo parecía perdido un capitán le llamó por teléfono para comunicarle que había ocupado un pequeño aeropuerto y que lo ponía a su disposición para derrotar a los golpistas. "Ese capitán se llamaba Manuel Antonio Noriega" sentencia.

Para el ex presidente dominicano, la actual crisis -"de carácter típicamente caribeño"- no tiene una salida a corto plazo y se prolongará hasta que el presidente Ronald Reagan abandone la presidencia de Estados Unidos.

El torrijismo del que Noriega, según Bosch, es el heredero se basa en "una lucha por la independencia nacional en la que no se ha disparado un tiro, que se realiza sin fusiles ni cañones". Recuerda que en la historia de Panamá "no aparecen dictaduras militares como las de Somoza [Nicaragua], Trujillo [República Dominicana] y Pérez Jiménez [Venezuela]". Y mantiene que "se está ocultando a la opinión hechos como el de que varios mandos militares son profesores de la Universidad de Panamá".

Bosch se confiesa marxista, pero no soy comunista", matiza. No cree viable para los países subdesarrollados el sistema democrático vigente en los países occidentales avanzados. "La organización política propia de los países desarrollados no puede funcionar en países que no tienen ese nivel económico", afirma.