Hess fue sepultado en secreto en el mausoleo familiar, a los siete meses de su muerte

Rudolf Hess, el ex lugarteniente de Hitler que se suicidó hace siete meses en la prisión de Spandau, fue sepultado privadamente ayer en el mausoleo familiar del cementerio bávaro de Wunsiedel, según informó un portavoz de la policia.El entierro de Hess, que duró 40 minutos, se inició a las 8,30 horas en presencia únicamente de 11 miembros de su familia. Hess había sido enterrado en un lugar secreto tras su muerte el 17 de agosto del año pasado, para evitar manifestaciones de grupos de neonazis que habían acudido a Wunsiedel desde varios países. Los restos de Hess fueron trasladados en secreto durante la madrugada de ayer hasta Wunsiedel, adonde llegaron a las 4,30 horas, sin ningún tipo de incidentes. La policía había acordonado el cementerio desde la noche anterior.Filmación en vídeo

Ni la esposa ni la hermana de Hess pudieron asistir al entierro, debido a que están gravemente enfermas. Esta última cedió su lugar en el mausoleo familiar para que pudieran descansar los restos de su hermano. A la ceremonia asistieron apenas una decena de personas, entre ellas el hijo de Hess, Wolf Rudiger, el ahogado de la familia y ex ministro del Interior de Baviera, Alfred Seidl, y la que fue secretaria del lugarteniente de Hitler. El acto fue filmado íntegramente en vídeo para que fuera visto por la viuda y la hermana, pero no está previsto que las imágenes sean ofrecidas para su difusión.

Hess tenía 93 años cuando se suicidó el 17 de agosto de 1987 en la prisión internacional de Spandau, en Berlín Oeste, de la que era el único ocupante y en la que había pasado 46 años desde que fuera condenado a cadena perpetua por el tribunal de Nuremberg, tras la II Guerra Mundial. La prisión fue destruida tras la muerte de Hess y en sus terrenos, enclavados en la zona militar británica de Berlín, se está edificando un parque de atracciones y un supermercado.

Roland Weber, portavoz de la policía bávara, dijo que el acto "se desarrolló como un funeral normal, aunque la familia acudió a la iglesia después de que el ataúd fuera despositado en el mausoleo, en lugar de hacerlo antes".

La familia ha expresado sus dudas sobre la versión oficial de la muerte de Hess ofrecida por los aliados (EE UU, la URSS, Francia y el Reino Unido). Grupos neonazis han afirmado que Hess fue asesinado por sus guardianes. El ex lugarteniente de Hitler intentó suicidarse en otras tres ocasiones, pero en todas ellas fue salvado por sus vigilantes.