El Plan de Prevención de la Delincuencia, paralizado desde hace dos meses por falta de personal

El Plan de Prevención de la Delincuencia y la Marginación Social en San Blas, Orcasitas y Pan Bendito se encuentra paralizado en estos dos últimos barrios por falta de abogados, asistentes sociales y personal administrativo, según reconocieron fuentes próximas al plan. Seis de las 14 personas que coordinaban las actividades finalizaron sus contratos el 31 de diciembre, y aún no se ha decidido la forma en que se cubrirán las vacantes. Las asociaciones vecinales han criticado en repetidas ocasiones la "ineficacia" del plan.

Decenas de jóvenes de Orcasitas y Pan Bendito, de los 600 que entraron en contacto con el plan el año pasado, se han desenganchado del seguimiento y de las actividades del Plan de Prevención de Delincuencia desde principios de año, según reconocen las misma fuentes.Ambos barrios del sur de Madrid han dejado de contar con los servicios de dos abogados y dos asistentes sociales, encargados del seguimiento de los jóvenes y de la asistencia jurídica a los detenidos. El parón ha afectado también al propio gerente, Antonio Ubierna, que ha estado más de un mes sin secretaria.

El Plan de Prevención de la Delincuencia fue creado en mayo de 1984 por un convenio entre la Comunidad, el Ayuntamiento y la Delegación del Gobierno. Las asociaciones vecinales de los barrios afectados han criticado en repetidas ocasiones la "ineficacia" y el "corto alcance" del plan.

Según Emilio Fernández, miembro, de la Asociación de Vecinos Meseta de Orcasitas, "el plan no ha sido capaz de invertir todo el dinero en ningún año". Las entidades vecinales señalan también que fondos destinados al plan han sido desviados a fines distintos.

El presupuesto de este año es aproximadamente de unos 160 millones de pesetas, de los que 100 millones se destinan para subvencionar distintas instituciones, realizar obras y acondicionar locales para crear talleres-escuela y centros de formación laboral. El resto corresponde a gastos de personal.

En diciembre finalizaron los contratos temporales de seis trabajadores. Las otras siete personas que forman el actual equipo acabarán también sus contratos en junio. Esta situación, en opinión de las citadas fuentes, podría "poner la puntilla definitiva al plan". Una veintena de animadores y educadores en contrato de servicios participa también en las actividades.

El gerente, Antonio Ubierna, afirmó ayer que pretende "rescatar" a los seis trabajadores cuanto antes, pero señaló que el principal obstáculo es la ley de la Función Pública de la Comunidad de Madrid, que prima la creación de puestos de funcionarios. Los seis trabajadores estuvieron vinculados al plan con contratos temporales durante tres años.

Cubrir las vacantes

El gerente afirmó que aún no está decidido ni cuándo ni cómo se cubrirán las vacantes. Fuentes próximas al plan afirmaron que la solución más probable es la convocatoria de plazas como funcionarios interinos, a las que aspirarían los trabajadores que finalizaron su contrato.Antonio Ubierna salió al paso de las críticas vecinales y afirmó que el Plan de Prevención de la Delincuencia ha conseguido "logros importantes" en los últimos años, como la creación de tres cooperativas, la creación de talleres-escuela, la asistencia jurídica y social a numerosos detenidos o las subvenciones a entidades ciudadanas.