Socialistas y democristianos exigen el fin del secuestro

El secretario de organización del PSOE, Txiki Benegas, exigió ayer a ETA la liberación de Emiliano Revilla y exhortó a los delegados asistentes al Congreso del PSOE de Aragón a hacer otro tanto. El dirigente socialista, que acudió ayer a Zaragoza para participar en la inauguración del Congreso, declaró que "al igual que las medidas de reinserción no se mantendrán permanentemente, la actitud del Gobierno de apertura al diálogo y a los contactos con ETA no estará vigente siempre". El presidente del Partido Demócrata Popular, Javier Rupérez, se sumó ayer públicamente a la petición de que Revilla sea puesto en libertad.El vicesecretario general de los socialistas vascos, Juan Manuel Eguiagaray, también reclamó a la organización terrorista la inmediata liberación de Emiliano Revilla durante el acto de entrega del II Premio por la Paz Enrique Casas, concedido en esta ocasión al escritor y periodista Luciano Rincón. Eguiagaray advirtió que quienes han secuestrado a Revilla "están apostando para que sigan muchísimo más tiempo en las cárceles los actuales presos de ETA".

Eguiagaray agregó que "en la medida que existan atentados, que existan secuestros, no va a haber contactos y, en consecuencia, esto es algo que está dificultando la paz que buscamos. Y me parece que, desde luego, va a ser muy perjudicial para quienes en estos momentos están en las cárceles".

Tras señalar que "por este camino va a ser más difícil" terminar con el terrorismo "pero va a ser peor también para ETA", el vicesecretario general del PSE-PSOE aconsejó "templar los nervios". Y premonizó: "Las dificultades como las que ahora se han creado y como las que se pueden crear quizás en procesos ulteriores van a seguir existiendo".

El Consejero de Interior del Gobierno vasco, Luis María Retolaza, declaró a la agencia Efe que si en ETA hay miembros no controlados por la dirección y que no aceptan las conversaciones con el Gobierno central "ese es un problema de ETA". Retolaza agregó que el secuestro de Emiliano Revilla es, "desde el espíritu de la Administración central, un acto de violencia y desde ese punto de vista considero lógico que sea un motivo suficiente para suspender las conversaciones".

"ETA tiene que ser consecuente y si, los que se han sentado en la mesa de Argel lo han hecho diciendo que controlaban a toda la organización, ahora tienen que aguantar las consecuencias de este acto de violencia", subrayó Retolaza. Dichas consecuencias van a ser, según él, que "se alargarán las conversaciones, y eso no es bueno para Euskadi, sobre todo después del horizonte que habíamos empezado a vislumbrar".

El presidente del PDP, Javier Rupérez, que ayer se entrevistó en Vitoria con el lehendakari José Antonio Ardanza, hizo un llamamiento a los secuestradores de Revilla para que "por razones de simple humanidad le pongan inmediatamente en libertad".