La fiscalía pide seis años de inhabilitación para el jefe del grupo de elite de información policial

La Fiscalía del Estado ha solicitado seis años de inhabilitación y siete meses de prisión menor para el comisario Alberto Elías Hernández, responsable de la Brigada de Interior, grupo de elite de los servicios de información policiales, encargada de recabar datos políticos, económicos y terroristas. La fiscalía considera a Elías autor de un delito de infidelidad en la custodia de documentos, por el que actualmente se encuentra procesado. La celebración de la vista oral del juicio está pendiente de que las otras partes del caso envíen a la Sección Sexta de la Audiencia de Madrid sus conclusiones.

El comisario Alberto Elías está acusado, de infidelidad en la custodia de documentos, en concreto de unas grabaciones telefónicas efectuadas por miembros de su brigada en febrero y marzo de 1984 en el domicilio y despacho profesional de José María Sabater Codina, amigo y colaborador de José María Ruiz-Mateos. La Brigada de Interior solicitó a la autoridad judicial, en concreto al Juzgado de Instrucción número 21 de Madrid, la concesión de intervención de los teléfonos, que le fue concedida e incluso ampliada por más tiempo. La brigada de Elías sospechaba que Sabater podría estar relacionado con unas actuaciones sobre compra y venta de armas.Las conclusiones definitivas de la fiscalía señalan que "hasta el día 15 de mixzo [de 1984], funcionarios policiales vinieron escuchando y grabando las conversaciones. mantenidas. No obstante, las grabaciones obtenidas fueron borradas con conocimiento y anuencia del procesado [se refiere a Alberto Elías], responsable policial de la investigación que se estaba llevando a cabo, pese a que no contaba con la pertinente autorización judicial para ello".

"Por este motivo, cuando el día 25 de junio de 1984 el juez que conocía del referido procedimiento criminal requirió al procesado para que pusiese a su disposición las grabaciones obtenidas, éste hubo de limitarse a entregar unas transcripciones mecanográficas y en algunos casos no totalmente fieles, al recogerse no el contenido íntegro de los mensajes, sino únicamente una interpretación valorativa de su significado", añaden las conclusiones.

"Del contenido de las conversaciones escuchadas no surgió elemento alguno que, ni siquiera remotamente, sirviese para confirmar las sospechas q ue motivaron la observacióntelefónica", agrega el fiscal sobre la investigación policial efectuada a Sabater.

La fiscalía pide para el procesado "siete meses de prisión menor y 100.000 pesetas de multa con 16 días de arresto sustitutivo en caso de impago; y seis años y un día de inhabilita ción especial para todo cargo o empleo en las Fuerzas de Segu ridad del Estado".

Tras la entrega de las conlusiones del fiscal, queda antes de la vista oral del juicio que el abogado de Sabater y el de Elías efectúen las suyas. Puestos en contacto con Carlos Usúa, abogado de Sabater, señaló su inconformidad con la calificación del fiscal y adelantó que "pediré más pena para Elías". Por su parte, los reiterados intentos de localizar ayer a Elías resultaron infructuosos.

Filtraciones

El fiscal por otro lado, considera que no existen pruebas que relacionen a Elías con la posterior filtración de las grabaciones a publicaciones del Grupo 16, que las publicó. En un principio, la fiscalía pidió el procesamiento del periodista José Luis Gutiérrez, aunque la Audiencia de Madrid lo desestimó en enero de 1987.

Por otro lado, Elías, como jefe de la citada brigada, es el principal implicado en las diligencias judiciales practicadas hasta ahora en relación con el espionaje policial a los partidos políticos.

Los policías que figuran en esas diligencias como los presuntos autores de informes sobre partidos pertenecían a la Sección de Movimientos Sociológicos de la brigada.