La primera visita de Thatcher a la OTAN revela discrepancias en la Alianza
La visita que la primera ministra británica Margaret Thatcher realizó ayer, por primera vez, a la OTAN puso de manifiesto las discrepancias en el seno de la organización defensiva sobre sus prioridades tras la reciente firma del acuerdo sobre la eliminación de los euromisiles, apenas a dos semanas de la cumbre de la Alianza Atlántica.La jefa del Gobierno británico, que solicitó la convocatoria de la cumbre, hizo hincapié ayer durante una conferencia de Prensa en la necesidad de modernizar las armas nucleares de corto alcance (SNF, de menos de 500 kilómetros) desplegadas en el Viejo Continente, cuyo desmantelamiento no debe ser negociado por ahora con la Unión Soviética, a diferencia del de las armas nucleares de alcance intermedio (INF, de 500 a 5.000 kilómetros) que quedó sellado en la última cumbre entre Ronald Reagan y Mijail Gorbachov en Washington.
División en la RFA
El Gobierno de la República Federal de Alemania (RFA) está, en cambio, dividido sobre la oportunidad de la modernización, pero su canciller, Helmut Kohl, considera que en todo caso la reducción de las armas nucleares tácticas puede empezar a ser discutida este mismo afío, tal y como lo desea el líder soviético Gorbachov.En una intervención en consonancia con sus conocidas tesis, la dama de hierro recordó primero que los "principales objetivos sovíéticos consisten en separar a Europa occidental de Estados Unidos, en disolver la OTAN ( ... ) y desnuclearizar Europa" mientras el propósito de su Gobiemo es mantener la disuasión nuclear y, enfatizó, "no se disuade con armas obsoletas".
"No se disuade", prosiguió Thatcher, "enviando a las tropas al campo de batalla con armas peores que las de enfrente". "Es totalmente absurdo separar la puesta al día de las armas convencionales de las de otro tipo de armas" y confirmó que al margen de las decisiones que tome Washington al respecto, el Reino Unido modernizará las suyas.
Thatcher resaltó que la negociacion sobre desarme convencional y químico era prioritaria y que sólo "una vez concluida acaso podamos volver a hablar de nuevo de armas nucleares" a pesar de lo cual se esforzó por restar importancia a sus discrepancias con su homólogo germano occidental al afirmar que "él es el primero en decir que no desea una tercera opción cero". La primera ministra británica evitó asimismo criticar las iniciativas militares franco-alemanas.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.