Los estudiantes, sospechosos en Seúl.
Un policía surcoreano registra en Seúl la cartera escolar de un joven, cerca del edificio de la embajada norteamericana. Grupos estudiantiles radicales habían convocado para ayer jueves una manifestación para protestar por las presiones estadounidenses para aumentar sus exportaciones a Corea del Sur, país que tiene un abultado superávit comercial con EE UU. Pero efectivos políciales, equipados con material antidisturbios, tomaron posiciones alrededor de la embajada para prevenir incidentes.
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