Escasa presencia de sindicalistas en las delegaciones

La presencia de sindicalistas de UGT es muy escasa entre los 850 delegados electos al 31º congreso del PSOE, a causa de la postura adoptada por Nicolás Redondo de mantenerse al margen del mismo. Oficialmente, todos los militantes del PSOE pertenecen también a UGT. Sin embargo, muy pocos delegados son cuadros o dirigentes del sindicato, y ninguno de ellos figura en la dirección confederal. En congresos anteriores hubo mayor presencia de sindicalistas.

Entre los escasos ugetistas que asistirán al 31º Congreso como cabeza de delegación figura Andrés Díez, dirigente provincial del sindicato en Valladolid.

La presencia de Andrés Díez en el primer puesto de la lista oficial de Valladolid, por delante de pesos pesados en la federación socialista, como el eurodiputado y secretario provincial, Juan Colino, y el alcalde vallisoletano y presidente de la Federación Española de Municipios y Provincias, Tomás Rodríguez Bolanos, fue una sorpresa. Andrés Díez no lo considera así. "Lo que pasa es que como existían discrepancias, que no enfrentamiento, entre dirigentes nacionales de UGT y el Gobierno, se ha dado mucho bombo a mi elección", declara.

Andrés Díez no es especialmente crítico con la dirección del partido, pero asegura que ha habido fallos: "Se ha visto poco al partido y mucho al Gobierno en los últimos tiempos y esto no es bueno porque debe ser el partido quien marque las directrices".

Otro cabeza de delegación, con cargo en UGT, es José Antonio Amate, parlamentario y secretario provincial de Almería. Algunos sindicalistas figuran, asimismo, en las listas de Zaragoza, como el dirigente del metal de dicha provincia, Tomás Iglesias. En el congreso estará presente José Ángel Fernández Villa, secretario general del SOMA-UGT, el sindicato minero. No ha sido elegido delegado, sino que asiste como miembro de la actual ejecutiva federal del partido, a la que pertenece.

Fernández Villa es un hombre con mucho peso en la federación socialista asturiana, que ha protagonizado un viejo enfrentamiento con otros dirigentes sindicales más próximos a la línea de Nicolás Redondo.

Entre los delegados al congreso figura también el parlamentario Justo Zambrana, dirigente dimisionario de la ejecutiva confederal de UGT.