La Ópera en televisión

La actual programación de Televisión Española mantiene sus niveles habituales de audiencia a la espera del importante cambio del esquema que entrará en emisión el próximo mes de enero, según los datos facilitados por los audímetros de Ecotel.Las únicas variaciones de importancia derivan de la ínclusión de retransmisiones -deportivas de forma habitual- que rompen las costumbres establecidas de los telespectadores. La pasada semana, Televisión Española ofreció el domingo, día 13, una ópera de larga duración -casi cuatro horas de programa-. El espacio fue visto, al menos por un instante, por un elevado número de espectadores -alrededor de trece millones de personas-. Sin embargo, la inmensa mayoría huyó de inmediato a refugiarse en la primera cadena. El índice de fidelidad de la emisión obtuvo un valor de 6.4. Esto quiere decir que, como media, los espectadores vieron poco más de cinco minutos del total de cuatro horas de duración. Se trata de uno de los más bajos índices de audiencia obtenidos por un programa de TVE en los últimos meses. La ópera televisada resulta por tanto, como no es difícil de imaginar, un género poco apreciado por los telespectadores españoles.

En relación al resto de los datos reflejados en el cuadro adjunto, destacan las variaciones derivadas de la existencia de un día festivo, el pasado martes día ocho. En esa joma da, en los niveles convencionales se produjeron importantes modificaciones. Así, aumentó de forma importante la audiencia de sobremesa. El telefilme Hotel obtuvo un porcentaje diez puntos por encima de su media habitual. Por el contrario, la banda horaria de noche descendió sensiblemente, quizá derivado de que los espectadores, por ser jornada festiva, salieron fuera de casa en mayor medida que un día habitual.

En cuanto a contenidos concretos, los datos de los audímetros parecen indicar el éxito de algunos programas, como el coloquio sobre las jóvenes hinchadas futbolísticas ofrecido por el En familia de Iñaqui Gabilondo y por el telefilme británico Bluebell.