Las privatizaciones francesas han inyectado 60.000 millones francos en las bolsas
Los resultados de las primeras privatizaciones del programa de venta al público, y a grupos empresariales de empresas nacionalizadas, según una lista que afecta a más de 60 sociedades, fue debatido ayer en la Asamblea Nacional Francesa en una discusión televisada en directo. El debate se convirtió en diálogo de sordos entre socialistas y conservadores. El programa privatizador ha inyectado 60.000 millones de francos (más de un billón de pesetas) en las bolsas francesas.
El ministro francés de Economía, Edouard Balladur, rechazó uno tras otro los argumentos esgrimidos contra las privatizaciones y calificó a sus principales detractores, los socialistas, de "representantes del pasado" y de "estatalinas".El portavoz socialista, Pierre Joxe, pidió al Gobierno un respiro en las privatizaciones y acusó a los conservadores franceses de ser más reaganistas que Reagan. "Ustedes son los últimos reaganistis de Europa y del mundo", asegruró. Las primeras privatizaciones han creado cuatro millones de nuevos accionistas y han supuesto la inyección de 60.000 millones de francos (12 billones de pesetas) en las bolsas.
La crisis bursátil, que ha devaltado las acciones de las privatiza las en más de la mitad de los casos, y las elecciones presidenciales de 1988 fueron los dos puntos Los más destacados del debate: La crisis, por el desgaste que puede ocasionar en la imagen del Gobierno entre los pequeños accionistas. Las elecciones presidenciales, porque el balance de las privatizaciones puede traducirse en rentas electorales para unos o para otros, según como vayan las cosas. Las cámaras de televisión estaban allí, precisamente en demostración de que en el debate parlamentario ninguna de las partes tenía nada que decir a la otra sino al público francés, con la ojos puestos en las próximas elecciones.
Los 'amigos' del ministro
Las principales objeciones socialistas a las privatizaciones se centran en los llamados núcleos duros, o grupo de accionistas designados directamente por el ministro de Economía, para asegurar la continuidad y la estabilidad de las empresas. Pierre Joxe habló de los "amigos" del ministro al referirse a estos accionistas privilegiados que controlan las antiguas empresas nacionales. La opinión del Partido Socialista es compartida por algunos sectores de la Unión para la Democracia Francesa (UDF), que consideran excesivo el peso en los núcleos duros de los grandes empresarios vinculados al neogaullismo. La mayoría conservadora, sin embargo, cerró filas alrededor de Balladur, que no encontró grandes dificultades en sus propias filas.El segundo gran flanco de ataque socialista fue la próxima privatización de la Union d'Assurances de France (UAP), prevista inicialmente para el mes de diciembre. Según los socialistas, parte del patrimonio que se pondrá a la venta pública es en realidad propiedad de los asegurados. Los socialistas declararon el pasado fin de semana que, si llegan al Gobierno, nacionalizarán de nuevo todas las empresas privatizadas con posterioridad a la crisis bursátil y a su llamamiento a la realización de una pausa. "Habéis entonado un himno al mercado", manifestó el ex primer ministro Pierre Mauroy, en referencia a la crisis de la bolsa, "y el mercado os ha devuelto ya la respuesta".
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.