Los documentos de 'Potros' indican que disminuye la capacidad operativa de ETA

La capacidad operativa de ETA, su infraestructura y sus medios económicos se encuentran actualmente seriamente disminuidos, según los experto 3 del Ministerio del Interior que han analizado las cerca de 60 autocríticas de etarras detenidos en los dos últimos años, así como otros doumentos intervenidos al jefe del aparato militar de la organización terrorista, Santiago Arrospide Sarasola, Santi Potros, apresado recientemente en Francia.

Por otra parte, los Reyes recibieron ayer en audiencia en el palacio de la Zarzuela al Consejo Superior de la Policía, encabezado por el ministro del Interior, José Barrionuevo, a quienes trasmitieron su apoyo por el trabajando que están desarrollando, especialmente en la lucha antiterrorista.Fuentes del departamento precisaron que no se han levantado aires triunfalistas, puesto que "el golpe a ETA ha sido muy duro, pero aún quedan muchos terroristcas en la calle".

El jeje del comando Araba que actuaba en Vizcaya y Vitoria afirma en su autocrítica a la dirección de ETA: "En el piso de los chicos sólo podemos estar ya los fines de semana. Nos han dicho que no están dispuestos a tenernos. Nos queda otra casa, pero tampoco podemos estar allí más de un par de días".

El responsable del comando que actuaba en Álava describe que la caída del grupo se produjo por dificultades de movimientos al y especialmente porque tuvieron que utilizar sus propios vehículos, ante la ausencia de otros automóviles que la organización terrorista solía camuflar con matrículas falsas o con documentación perteneciente a ciudadanos reales.

"En Vitoria", dice una de las autocríticas, "viendo que la casa que terrenos no es muy segura, porque es de gente que ha participado en juicios y visitas a cárceles, hemos alquilado un piso. Son 24.000 pesetas al mes. Intentamos encontrar otro con garaje individual, pero parece imposible pues los precios están a partir de las 60.000".

Filtraciones

ETA, según los análisis de los expertos, había utilizado la mayoría de si es medios económicos en los comandos Madrid y Barcelona, donde pensaba desencadenar una importante ola de atentados, como demuestra la campaña realizada en la capital de España, hasta la detención del grupo, y la iniciada, en la capital catalana, donde ETA perseguía la máxima propaganda de sus acciones al ser sede de los Juegos Olímpicos de 1992Pilar Aramburu, del comando Madrid, asegura en su carta a la organización terrorista que recibió entre 1986 y 1987 cerca de 10 millones para comprar el chalé de las afueras de Madrid que caería posteriormente con la mayoría de la infraestructura de este grupo. Sin embargo, relata que en el sur de Francia existían dificultades de movimientos y de organización por las acciones de los GAL y la presión de la policía francesa con las expulsiones por vía de urgencia.

Araniburu avisa a ETA sobre la posibile filtración a finales de 1985 puesto que "un refugiado o familiar sabía que había comprado el chalé y pensaba que era para la organización". Ante eso, Pilar Aramburu sugiere a la dirección de ETA "la máxima reserva para las captaciones" de nuevos miembros, ante el peligro de posibles infiltraciones en la banda terrorista.