FECSA consigue un acuerdo de principio con sus acreedores para reestructurar la deuda

Fuerzas Eléctricas de Cataluña, SA (FECSA), ha llegado a un acuerdo de principio con la banca acreedora, cuyos detalles se concretarán este mes. Con el acuerdo se afrontarán en noviembre las negociaciones con la Administración acerca de las compensaciones y del marco legal estable del sector. Las diferencias que persisten entre FECSA y los acreedores son "sólo de detalle", según la compañía, cuyo retorno a la bolsa parece inminente. En estos momentos, las operaciones extrabursátiles fijan un precio medio por acción del 80%, casi 20 puntos más que la última cotización oficial.

La gran ampliación de capital que FECSA ha negociado con sus acreedores está definitivamente establecida en 75.000 millones de pesetas, dentro de los cuales se incluyen los 18.000 millones que ya decidió suscribir el resto del sector eléctrico. De los restantes 57.000 millones, el sector eléctrico suscribirá, según lo acordado hasta ahora, 27.000 millones, de los que la Empresa Nacional de Electricidad (ENDESA) e Iberduero tomarían los mayores paquetes, a razón de unos 8.000 millones por entidad. Las demás firmas eléctricas suscribirían unos 1.000 millones cada una. Los 30.000 millones restantes de la ampliación de capital quedarían en manos de la banca acreedora española. Han quedado descartadas las propuestas de la banca extranjera, que propugnaba una ampliación de 125.000 millones.En cuanto a la emisión de obligaciones, su volumen rondará los 110.000 millones, según ha aceptado ya el comité de acreedores. De esta cantidad, las cajas de ahorro tomarían 78.000 millones y otras entidades (especialmente compañías aseguradoras) comprarían los 30.000 restantes. La rentabilidad de la emisión es uno de los puntos en los que no hay aún acuerdo, aunque las diferencias radican sólo en 0,75 puntos. FECSA ofrece un interés del 10%, mientras los tomadores no están dispuestos por ahora a firmar por debajo del 10,75%. El tipo que se pacte finalmente estará vigente durante los seis primeros años de los 10 que durará la emisión. Los cuatro restantes tendrán un interés variable que flotará ligeramente por encima de la inflación.

Bonos convertibles

El último aspecto de la gran inyección de capital, la emisión de bonos convertibles, aún no está definido, según fuentes de FECSA. El comité de acreedores ha aceptado una emisión de hasta 60.000 millones, mientras la compañía eléctrica pretende alcanzar los 70.000 millones. El paquete de emisiones, tanto de obligaciones como de bonos, destinado a sustituir las emisiones actualmente en circulación a tipos próximos al 14%, quedará pendiente de las posteriores conversaciones con la Administración sobre condiciones fiscales. FECSA espera obtener alguna ayuda en el aspecto de la desgravación para los canjeadores de una suscripción de bonos por otra.El diseño de la reestructuración de la deuda está ya definido, aunque no se haya alcanzado todavía acuerdo. La deuda se reconvertiría a 10 años, de los que, en opinión de FECSA, los cuatro primeros deberían ser de gracia (devolución de principal sin pagar intereses); los cuatro siguientes, con margen cero de intereses (tipo ajustado al mibor o al libor, es decir, sin beneficio adicional), para renegociar al llegar al último bienio un sistema de incentivos a los acreedores que les compensara en parte la merma de los anteriores. De momento los acreedores aceptan los cuatro años de gracia, pero exigen que los años con margen cero sean tres.

Paralelamente a esta negociación con el comité acreedor, FECSA ha dispuesto para la venta sus filiales hormigoneras, dentro de su filosofía de desprenderse de todas las actividades no eléctricas. La consultora Merrill Lynch ha efectuado la valoración de las hormigoneras, que ha. quedado fijada en 11.140 millones brutos, y ha buscado a los compradores. Según fuentes de la empresa eléctrica, la venta de las hormigoneras es inminente y podría cerrarse hoy mismo.

Cotización en bolsa

Por otra parte, la reanudación de la cotización de FECSA en bolsa parece próxima y podría producirse también este mes, según fuentes bursátiles. En los últimos días se han intensificado en la Bolsa de Barcelona las transacciones extrabursátiles de títulos de FECSA, en lo que medios técnicos consideran una toma de posiciones del dinero previa a que vuelvan a cotizar. En la operación más significativa, hecha pública ayer, un paquete de 115.000 acciones de FECSA fue vendido en Barcelona al 82% del valor nominal, casi un 20% por encima del precio al que se encontraban las acciones de la compañía en el momento de suspenderse la cotización en febrero. En marzo llegó a bajar al 30%.