Mayor Zaragoza tiene ya 5 votos seguros para dirigir la Unesco

El candidato a la dirección general de la Unesco, el parlamentario europeo por el Centro Democrático y Social Federico Mayor Zaragoza, cuenta con cinco o seis sufragios seguros en la primera votación del Consejo Ejecutivo del organismo, según fuentes de la legación española. El consejo, que se reunirá a partir del 6 de octubre para proponer un nombre a la conferencia general, tiene 50 miembros.El grupo árabe y africano, con sus 20 votos, apoyará previsiblemente a su candidato, el actual director general, Amadour Mahtar M'Bow, que lleva ya 14 años al frente de la organización y cuya retirada es condición imprescindibles para la reincorporación de Estados Unidos, el Reino Unido y Singapur.

Los países más críticos con la gestión de M'Bow apoyan al ministro de Exteriores de Pakistán, general Sahabzada Yaqub Jan, que espera recoger los nueve votos del grupo europeo y la mayoría de los siete del grupo asiático. Los cinco países del Este apoyarán al candidato búlgaro, Nikolai Todorov. España espera recoger sus votos en el grupo de Latinoamérica y el Caribe, aunque los tres votos caribeños irán previsiblemente a M'Bow.

Las esperanzas del candidato español se cifran en las dificultades de los dos candidatos mejor situados. para la obtención de la mayoría, pero necesita obtener un resultado mínimo para situarse como alternativa en las otras votaciones. Una parte de los países que han comprometido su voto con Yaqub Jan puede desistir en favor de Mayor Zaragoza o de otro candidato capaz de suscitar consenso entre posiciones muy polarizadas en las cinco votaciones sucesivas.

La victoria del candidato africano, ahora el mejor situado, puede significar la profundización de la crisis en que se encuentra la Unesco y la retirada o la suspensión del pago de las cuotas de Japón y de algunos países del grupo occidental. M'Bow, en cualquier caso, ha conseguido cortar, con la presentación de su candidatura, el alud de adhesiones que estaba recibiendo el general paquistaní, y erigirse en el árbitro de la elección, gracias al enorme peso de su grupo en el consejo ejecutivo.