Los socialistas cierran el pacto para arrebatar a AP la Xunta de Galicia

EI Partido Socialista Obrero Español (PSOE) cerró anoche un acuerdo con Coalición Galega (CG) y el Partido Nacionalista Galego (PNG) que le permitirá desplazar al aliancista Gerardo Fernando Alber de la presidencia de la Xunta. El debate de la moción de censura, presentada la pasada semana por los socialistas, se inicia hoy en el Parlamento gallego, y está previsto que la votación se celebre el próximo miércoles.

El pacto para situar al socialista Fernando González Laxe en la presidencia de la Xunta de Galicia quedó ultimado hacia las nueve, de la noche de ayer, después de que el PNG, que tiene como líder a Pablo González Mariñas, retirase su oposición a que José Luis Barreiro, ex vicepresidente del Gobierno autónomo con Albor, ostentase la vicepresidencia única en la futura Xunta.Los dirigentes de los socialistas gallegos ultimaban anoche con sus aliados el reparto de poder en el nuevo Ejecutivo, que, salvo decisiones personales imprevistas, se formará al triunfar la moción de censura. El Partido Socialista de Galicia (PSG-PSOE), que cuenta con 22 escaños en la Cámara autónoma, tiene concertados así los 10 votos de Coalición Galega y los cinco del Partido Nacionalista Galego, que le deparan 37 votos, suficientes para obtener la mayoría absoluta, ya que el Parlamento autónomo lo componen 71 diputados. Este respaldo se verá incrementado probablemente en la votación del miércoles, ya que tanto el PSG-Esquerda Galega (tres escaños) como el Bloque Nacionalista Galego (un diputado) aseguraron en días pasados que respaldarían la iniciativa de los socialistas para desplazar a AP del Gobierno de Galicia.

El pacto suscrito entre los tres partidos que formarán la nueva Xunta prevé que los socialistas asuman, además de la presidencia, cinco consejerías. Coalición Galega tendrá la vicepresidencia que venía reclamando para sí José Luis Barreiro y tres consejerías. Finalmente, el Partido Nacionalista Galego contará con dos carteras, una de ellas la de Presidencia.

Para que se llegase al pacto, González Mariñas tuvo que combatir las resistencias de otros destacados miembros del PNG que preferían aceptar una oferta de última hora que les planteó Alianza Popular.

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