Presión militar sobre Cory Aquino para que perdone a 'gringo' Honasan
El Gobierno filipino, encabezado por Corazón Aquino, puede conceder el perdón para el líder de la fracasada tentativa de golpe, Gregorio gringo Honasan, debido a que muchos de los 160.000 militares del país le apoyan abiertamente, según afirmó ayer el segundo jefe del Estado Mayor, general Eduardo Ermita.
Honasan, prófugo desde el fracaso del intento de golpe del 28 de agosto, se convirtió en héroe nacional durante la revuelta de febrero del año pasado, que derroc6 al dictador Ferdinand Marcos. Con su reciente intentona goIpista contra Aquino, en la que murieron 53 personas y resultaron heridas otras 300, pretendía introducir reformas en las Fuerzas Armadas y reactivar la lucha centra la guerrilla comunista.Ermita dijo que él personalmente estaba de acuerdo con los objetivos enarbolados por Honasan, y afirmó que los soldados de :tenidos por secundar al golpista "debieran ser amnistiados".
Sobre el perdón a Honasan, Ermita dijo a los periodistas que podría decirse que este tema está abierto, que es una posibilidad que puede ser discutida" siempre que Honasan se entrege.
La presidenta Aquino, que afirmó al día siguiente de la intentona que no podría haber perdón para ninguno de los golpistas, se encuentra bajo una fuerte presión de cuadros militares para que reforme su política hacia las Fuerzas Armadas y dé un mayor impulso a la lucha antiguerrillera.
Aquino, enfrentada a una crisis de Gobierno tras la renuncia de todos sus ministros en la semana pasada, anunció ayer a través de un comunicado oficial: "He decidido renunciar a mi proyecto de anunciar la composición de mi Gabinete por etapas". La presidenta agregó que su objetivo es poder formar un Gabinete que trabaje "en equipo". La crisis se desató tras declaraciones hechas ante el Congreso por el influyente ministro secretario general de la Presidencia, Joker Arroyo, quien acusó a importantes personajes civiles de haber apoyado el golpe. La Prensa de Manila especulaba ayer con la destitución de Arroyo y con la enterada en el Gabinete el jefe del estado mayor del Ejército, general Fidel Ramos.
Por su parte, un grupo de simpatizantes de la presidenta Aquino creó ayer un nuevo movimiento, Coalición para la Paz, con el objeto de reagrupar las fuerzas del poder popular, que resultó decisivo en la revuelta militar contra Marcos. Centenares de integrantes del nuevo grupo marcharon ayer por Manila con velas en apoyo al régimen de Aquino.
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