Ángeles López

La generosidad define a la responsable de la educación de adultos en Andalucía, Ángeles López Ruiz, una almeriense de 47 años que el próximo martes recogerá en París el primer galardón que la Unesco concede a España en materia educativa. El trabajo sobre educación de adultos en Andalucía fue presentado por la Junta de Andalucía en nombre del Gobierno español. Ella y su equipo de profesores están seguros de haber llevado por las tierras andaluzas una ilusión creciente.

Angeles López comenzó su labor en el mundo de la enseñanza de adultos en la provincia de Almería como profesora. El éxito de la experiencia piloto desarrollada en su tierra provocó el ofrecimiento del despacho que ocupa en la actualidad en la Consejería de Educación de la Junta de Andalucía, en Sevilla. Esta mujer de sonrisa amplia recuerda que hace tan sólo tres años eran 36 profesores en toda Andalucía los que se dedicaban a la alfabetización de adultos, mientras que en la actualidad la cifra supera los 1.300.Para el curso a punto de comenzar, la Consejería de Educación de la Junta de Andalucía tiene previsto destinar 4.000 millones de pesetas, 500 millones más que el pasado año. En la actualidad hay unos 600.000 analfabetos andaluces, lo que, unido al problema del bajo nivel de lectura, ofrece un campo de trabajo inmenso. Angeles López admite que hay mucho que hacer. El trabajo premiado por la Unesco reitera que corresponde a todo un equipo.

La soledad

Ángeles López no teme al problema de la droga y el alcohol. "La soledad y el consumismo", añade, "son peores males, que a veces tienen que atajar los profesores de adultos, convirtiéndose en asistentes sociales de muchas personas". Anuncia que está dispuesta a renovarse para que el paro y el ocio que impulsan la sociedad de consumo no contribuyan a generar mayor número de fracasos escolares y vitales.El cargo de Sevilla la ha alejado de su marido, también profesor de EGB, y de sus tres hijos, que permanecen en Almería. "A nivel de pareja", indica con cierta seriedad, "nos planteamos que el trabajo para adultos merecía todo esto". Su vida en la capital hispalense transcurre entre el trabajo de mañana y tarde y la lectura. Las nueve horas de tren que separan Sevilla de Almería le sirven, entre otras cosas, para reflexionar mucho sobre la desigualdad social.

La jefa del programa de educación de adultos de la Junta de Andalucía se revela como una ecologista empedernida. "Me he pateado todas las sierras de Almería". "Cada árbol vale una vida", recalca mientras se lamenta del alto índice de desertización que padecen las provincias de Granada, Murcia y Almería. Hija de un funcionario de Justicia y de una ama de casa, señala que su infancia se desarrolló como la de cualquier niño de la posguerra. Ángela López también tuvo una experiencia, poco conocida en la actualidad, durante los años 1959 y 1960 en radio Berja, la emisora de la Alpujarra almeriense. "Fue una experiencia inolvidable que me acercó a conocer más a mis paisanos y donde tuve contactos con los mayores".