Escasa afluencia de jornaleros al reanudarse las obras del empleo rural en Pruna

El Ayuntamiento de Pruna (Sevilla) continuaba ayer custodiado por la Guardia Civil, después de que fuerzas antidisturbios del cuerpo desalojaran el jueves a jornaleros de Comisiones Obreras que se encerraron dos días para protestar por la suspensión de las obras M Plan de Empleo Rural (PER). Las obras se reanudaron ayer, aunque muchos trabajadores no acudieron "por miedo a represalias" según el alcalde, el socialista Pedro Zamudio.

Vecinos de Pruna aseguran que varios jornaleros han huido del pueblo por temor a la Guardia Civil, aunque la cifra de los que se han ausentado no supera las dos o tres personas, según el alcalde.Los mismos vecinos, la mayoría residentes en El Puerto, barrio humilde y castigado por el paro, aseguran que entre 15 y 50 vecinos han tenido que marcharse del pueblo "por temor a los guardias". "Nosotros mismos", aseguran otros en las puertas de sus casas, "no podemos bajar a la plaza del ayuntamiento porque nos pillan y nos llevan para delante".

El suboficial al mando de los agentes que ayer custodiaban el Ayuntamiento negó rotundamente que tuvieran orden de busca y captura contra ningún vecino, asegurando que su labor se limitaba a patrullar cuando se les ordenaba. En el pueblo hay una importante dotación de fuerzas antidisturbios, que el día del desalojo, el jueves, se concretó en 100 agentes.

Al alcalde le consta que dos o tres vecinos, de los que participaron en los disturbios de la semana pasada, sí se encuentran huidos del pueblo. Zamudio, responsable de las obras del PER, continúa siendo amenazado de muerte. Siempre va escoltado por algún agente, y un vehículo rural de la Guardia Civil permanece apostado frente a su casa. Desde primeros de mes no acude a trabajar a su carnicería, ya que en esa fecha, cuando suspendió las obras por primera vez "para hacer las listas del paro", el local fue apedreado.

Miembros de CC OO aseguran que en las nuevas listas del PER no se encuentra ningún militante de este sindicato. Zamudio asegura que el criterio para su confección ha sido llamar a parados que aún no habían realizado ninguna peonada. Ayer sólo acudieron a trabajar poco más de la mitad de los (30 jornaleros llamados. Pruna tiene 3.800 habitantes, de los que 795 se encuentran en paro.

Tras los enfrentamientos del jueves pasado, cinco de los nueve jornaleros detenidos permanecen encarcelados en Sevilla. Dos de ellos, José Armario y Francisco Castillejo, son concejales de Izquierda Unida. Alfonso Romero y Tomás Fernández, médicos sustitutos de Pruna, atendieron durante la tarde del jueves a 22 contusionados, nueve de ellos miembros de la Guardia Civil. Antonia Godino, de 30 años, residente en el barrio de El Puerto, madre de tres hijos y esposa de Diego Jiménez, jornalero en paro, afirma que el jueves su casa fue allanada por la Guardia Civil. Antonia afirma igualmente que tras el asalto "desaparecieron 8.000 duros que estaban en la cocina".