La oposición en el Ayuntamiento de Madrid rechaza por segunda vez 82 nombramientos propuestos por el PSOE
El pleno del Ayuntamiento aprobó ayer el nombramiento de 12 funcionarios municipales como directores de servicios y rechazó otros 82 puestos propuestos por el PSOE para ocupar otros tantos cargos de confianza. AP votó en contra de estos nombramientos y retiró a última hora la propuesta de desalojar de sus despachos al personal que ocupaba cargos en el mandato anterior. El CDS obtuvo el respaldo unánime en su propuesta para crear una plantilla de funcionarios que cubran los puestos desempeñados antes por personal de confianza. Después de tres plenos en 16 días, el próximo será a mediados de septiembre.
La iniciativa del CDS levantó la polvareda de un pleno interminable de cerca de seis horas. El concejal centrista Javier Soto propuso la creación de una plantilla municipal de directores de servicio, de juntas municipales y de centros culturales. La propuesta se presentó como alternativa al nombramiento de 128 puestos de confianza para cubrir esas plazas, que fue propuesta por el PSOE en el pleno del 15 de julio, y rechazada. El debate para aprobar este punto se prolongó cerca de una hora, con continuos tiras y aflojas, algún que otro malentendido y muchas reiteraciones.Javier Soto insistió en que las plazas han de cubrirse con funcionarios municipales y no con contratados eventuales. Luis Larroque, portavoz socialista, presentó una enmienda que pretendía el nombramiento provisional de 96 cargos: 16 directores de servicio, 18 directores de centros culturales, 45 adjuntos a estas direcciones y 15 asesores técnicos. "Lo que pretendemos es llegar a un acuerdo para que el Ayuntamiento salga del impass en que se encuentra", precisó Larroque.
El PSOE obtuvo una victoria pírrica: el pleno aprobó -con el voto en contra de AP- el nombramiento con carácter provisional de 12 funcionarios municipales como directores de servicio. Y eso, después de una hora en que hubo de todo: desde un toma y daca en el turno de la palabra hasta una discusión baladí sobre qué era lo que se estaba votando.
Barranco se aburrió con el debate. El alcalde, que fue operado el miércoles de un pequeño quiste en el estómago, presidió el pleno durante cuatro horas y cedió el testigo a Luis Larroque. AP y CDS insistieron en la necesidad de "profundizar la función pública". Ramón Tamames, portavoz de IU, habló "del riesgo de crear un cuerpo de elite con un poder seudopolítico dentro del ayuntamiento".
Agradecimiento de Larroque
Luis Larroque agradeció el apoyo parcial del pleno -"nos viene de perlas poner en marcha los 12 directores de servicio"-, pero advirtió que, hasta que no haya un acuerdo global, quedan vacantes plazas como el director del Centro Cultural de la Villa o el jefe de protocolo.La sesión se cerró a las 17.45, después de pasar revista a 74 puntos del día y una veintena de proposiciones.
El pleno ordinario, que comenzó al mediodía, estuvo precedido de una sesión extraordinaria en la que se aprobó por unanimidad la creación de una comisión para decidir las atribuciones de las sesiones plenarias en los próximos cuatro años.
Todos los grupos parlamentarios coincidieron en que el pleno debe asumir las atribuciones que le corresponden por ley, incluidas aquellas que habían sido delegadas por la anterior corporación. Entre estas facultades se encuentran la aprobación de proyectos de obras, la contratación de obras y servicios cuya duración exceda de un año o la adquisición y transacción de bienes y derechos del municipio.
El PSOE obtuvo el consuelo de verse respaldado por todos los grupos para mantener la descentralización actual, que otorga a las juntas funciones como la contratación de obras de menos de 100 millones de pesetas o la aprobación de proyectos de urbanización.
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