Teherán amenaza con detener por "espías" a miembros de la misión diplomática francesa

El ministro del Interior iraní, Alí Akbar Mohtashami, afirmó ayer que algunos miembros de la Embajada francesa en Teherán son "espías" y "van a ser detenidos por la policía y entregados a la justicia", según informó la agencia oficial Irna. El ayatoleslam Mohtashami no dio nombres, pero añadió que "miembros de la Embajada francesa" han "ayudado a contrarrevolucionarios a escapar de Irán y se han puesto en contacto con grupos subversivos". Unos 30 diplomáticos y funcionarios permanecen en la sede diplomática francesa en Teherán, cercados por policías y pasdaranes o Guardias de la Revolución Islámica.

Hasta el presente, informa desde Beirut, Irán sólo había acusado de "espionaje" y, "tráfico" al primer secretario francés de Asuntos Consulares, Jean Paul Torri. Las declaraciones del ministro del Interior iraní hacen presagiar una especie de repetición de lo ocurrido en la Embajada norteamericana en Teherán, donde 52 personas permanecieron secuestradas 443 días entre 1979 y 1981.Francia se enfrenta también a la posibilidad de sufrir represalias por parte del integrismo musulmán en Líbano, dada la influencia del movimiento Hezbolá (Partido de Dios) sobre la comunidad shií. El futuro de los rehenes franceses es más angustioso que nunca, y sobre dos de ellos pesan ya amenazas de muerte. Yihad Islámica, el grupo clandestino amparado en el nebuloso Hezbolá, no había confirmado a primera hora de la tarde de ayer la amenaza telefónica efectuada el día anterior de "ejecutar de inmediato" a Marcel Carton y Marcel Fontaine, dos de los rehenes franceses. Un total de seis ciudadanos franceses están secuestrados en Líbano, uno de los cuales, el sociólogo Michel Seurat, murió, presuntamente, en cautiverio el pasado año.

Fuentes diplomáticas francesas en Beirut aseguran que, a la hora de romper relaciones con Teherán, París ha tenido en cuenta el hecho de que en lo que va de año no ha sido liberado ni uno solo de las dos decenas largas de extranjeros secuestrados. por grupos islámicos libaneses

El encargado de negocios francés en Teherán, Pierre Lanfrance, se entrevistó ayer con las autoridades iraníes para discutir sobre 1as modalidades de la ejecución de la ruptura diplomática", indicó un portavoz del Ministerio francés de Exteriores.

Hezbolá emitió ayer su segundo comunicado sobre la crisis franco-iraní, en el que afirma que "Francia ha cometido un error innoble" y que "al menor signo del Jomeini, todos los musulmanes se unirán a los muyaidines (combatientes de la fe) iraníes, para defender el islam". "Francia no ha aprendido la lección de lo que le ocurrió a la casa negra", dice Hezbolá, en lo que parece una alusión al secuestro de los miembros de la Embajada norteamericana en Teherán.

Se extiende la amenaza

El cerco a que está sometida la Embajada francesa en Teherán, medida simétrica a la impuesta por Francia en la Embajada iraní en París, cambia ahora de carácter, y se extiende la amenaza de violar la inmunidad diplomática, que hasta ahora sólo afectaba al cónsul Torri, a todo el personal francés en Tcherán, informa Lluís Bassets desde París. Irán presentó el viernes la ruptura de relaciones como una iniciativa propia, ante la violación de la Convención de Viena de 1961. Ésta garantiza la libertad de los diplomáticos para abandonar el territorio, pero no establece plazos precisos para la repatriación tras una ruptura diplomática.

Francia ha comunicado a Irán que la repatriación de los diplomáticos debe realizarse en el plazo de cinco días. Para el próximo miércoles se puede prever, por tanto, el momento más delicado de la crisis. Francia puede ver impedida la salida de sus diplomáticos en Irán, y éste verá diricultada,sin ninguna duda, la salida de Francia del traductor Wahid Gordji, número dos oficioso de la misión iraní en París, a quien la justicia exige presentarse a declarar sobre la ola de atentados perpetrados el año pasado en París. Todo el peso de la ruptura incidirá precisamente en el incidente que está en su origen: el estatuto de Gordji, sin inmurtidad diplomática reconocida por Francia y acogido a ella segun Irán. Los otros diplomáticos iraníes en París pueden hallar, asimismo, dificultades en la repatriación, pues fuentes oficiales francesas han asegurado que aplicarán medidas de reciprocidad, reconocidas por la propia Convención de Viena.

Francia puede retener a los iraníes mientras Irán no libere a los franceses. De hecho, cuatro iraníes que fueron detenidos el viernes en París recibieron ayer una orden de expulsión del territorio francés con asignación de residencia en su embajada en Francia. Los cuatro forman parte del personal de la misión, pero no tienen rango diplomático.

Irán cuenta con cinco diplomáticos acreditados en París, y Francia, con 11, y no ocho, como se dijo en un primer momento, en Teherán. Tras la ruptura de las relaciones, Italia ha accedido a representar los intereses franceses en Teherán, según se informó oficialmente ayer en París.