Alcalde socialista en las dos plazas

Las ciudades de Ceuta y Melilla volverán a tener alcalde socialista, aunque en uno de los dos casos el político elegido no renueva su mandato.Efectivamente, Fructuoso Miaja, del PSOE, fue designado ayer alcalde de Ceuta, con 11 votos, al ser su partido la lista más votada en las pasadas elecciones generales; pero contó con el apoyo en la votación de los tres concejales del Partido Socialista del Pueblo de Ceuta, grupo del anterior alcalde que en su día se escindió del PSOE.

Los restantes partidos que componen la corporación -AP (6 concejales), Ceuta Unida (6 concejales) y CDS (dos ediles)-, refrendaron a sus cabezas de candidatura.

Miaja, tras su toma de posesión, dijo que deseaba ser el alcalde de todos los vecinos de la ciudad y de todas las comunidades que componen el espectro de la población. En su discurso señaló también que deseaba un ayuntamiento democrático, dialogante y participativo, y que primero será Ceuta y luego lo demás.

El nuevo alcalde concluyó asegurando que esperaba un período de cuatro años de gestión, en clara referencia a que durante las dos últimas etapas Ceuta ha contado con cuatro alcaldes en ocho años.

La sorpresa en la votación para alcalde fue el apoyo del Partido Socialista del Pueblo de Ceuta al PSOE, cuando durante los dos últimos años en el ayuntamiento, y también en el transcurso de toda la campaña electoral, las críticas han sido la nota destacada en las relaciones entre ambos grupos políticos, notablemente enfrentados.

En el actual ayuntamiento no hay ningún representante de la minoría musulmana, ya que los partidos políticos que concurrieron a las elecciones no incluyeron a miembros de esta comunidad, y las diversas asociaciones musulmanas decidieron no presentarse a los comicios.

En Melilla, Gonzalo Hernández, del PSOE, resultó reelegido para un nuevo mandato de cuatro años, al tener su partido la mayoría absoluta de la corporación con 13 concejales. Por su parte, AP y Unión del Pueblo Melillense tienen ocho y tres ediles, respectivamente; y uno el CDS. Los concejales de Alianza Popular votaron a su candidato, Luis Fernández Mufloz, mientras que Unión del Pueblo Melillense y CDS optaron por la abstención, que de todas formas no influía para nada en la votación final.

En esta ciudad se repite la misma situación que en Ceuta, donde ningún musulmán alcanzó escaño, aunque aquí un grupo político, el Partido Liberal Progresista de Melilla, incluía a cinco miembros de esta minoría en sus listas.