La 'onorevole' Cicciolina colapsa el tráfico en Roma

llona Staller, Ciccolina, de 37 años, hoy ya onorevole (honorable) tras su elección como diputada, paralizó el miércoles el tráfico del centro de Roma con ocasión de una reunión informativa a la que había sido invitada en la Asociación de la Prensa Extranjera. Antes de la conferencia, los carabineros tuvieron que salvarla de una muchedumbre enardecida que quería no sólo verla y oírla mientras celebraba en la romanísima plaza de Navona su elección al Parlamento, sino también palparla.

Nunca hubo tal despliegue de policías, carabineros y hasta militares ante la Asociación de la Prensa Extranjera. La plaza de San Silvestre y la Via della Mercede estaban abarrotadas de curiosos. La policía tuvo que cargar contra la gente, toda de sexo masculino, y en los empujones se le rompió un pie a un angelito de una de las estatuas de la fontana de los Cuatro Ríos de Gian Lorenzo Bernini. En vano. lo ha buscado la policía. La organización ecologista Amigos de la Tierra ha solicitado al alcalde de Roma el procesamiento de Cicciolina como responsable de los daños que sufrió la fuente.En su primera experiencia como parlamentaria ante cientos de periodistas extranjeros, Cicciolina, en su papel de ingenua muñeca del sexo, se defendió de las preguntas maliciosas, picantes o provocadoras.

Abrazada a su inseparable peluche, su cicciolino, llegó cubierta de un vestido blanco que le llegaba hasta los pies pero que enfundaba su cuerpo como la piel de una serpiente. El vestido le cubría justo los pechos. Pero durante la conferencia de prensa de vez en cuando se sacaba uno de ellos y decía: "Para vosotros, mis cicciolinos fotógrafos". En la mano llevaba un capullo de rosa que besaba y chupaba continuamente.

Preguntada sobre cómo resolver el problema de la energía nuclear, contestó: "A mí me gustaría que todos pudieran calentarse con el amor, pero creo que se podría resolver también con la energía solar". El periodista insistió: "¿Con el sol, pero cómo?". Y respondió: "Ah, yo sólo conozco, y bien, todas las técnicas del amor; las demás se las dejo a los expertos". "¿Cómo resolvería el problema del SIDA?". "Gastando para combatirlo el dinero que se gasta en las armas. Sin embargo, estoy en contra de las fábricas que están aumentando la producción de preservativos. Todos los que quieren hacer el amor conmigo saben que tienen que hacerlo sin condón".

Dijo que le gustaría librar batallas tan grandes a favor de la libertad de pornografía, de la enseñanza sexual en las escuelas y contra la energía nuclear que llegasen a meterla en la cárcel. Sin embargo, su inmunidad como diputada la defenderá contra todo un rosario de querellas por ofensa al público sentido del pudor.

Un grupo de milanesas ha pedido al presidente de la República, Francesco Cossiga, que anule la elección de Cicciolina, "que hiere la imagen de la mujer italiana".