Los abogados de Bokassa presentan recurso ante el Tribunal Supremo

Bangui Los abogados defensores del ex emperador Jean Bedel Bokassa presentaron ayer recurso ante el Tribunal Supremo de Bangui contra la sentencia de muerte, sin atenuantes, emitida el viernes por la justicia de la República Centroamericana. Pese a los rumores que circulaban los últimos días sobre eventuales enfrentamientos tribales, los barrios de Fátima, Kilómetro Cinco y Miskine de la capital -donde se concentran los simpatizantes de Boliassa- permanecieron en calma la noche del viernes y ayer.

"Vamos a seguir la batalla para evitar la ejecución de la pena de muerte de Jean Bedel Bokassa, hasta la última instancia jurídica", dijo ayer el abogado francés, de la defensa Francis Szipiner, poco antes de salir de Bangui hacia París. Szipiner y su colega, François Gibault, añadieron que no se espera una respuesta al recurso hasta al menos dentro de tres meses. Sólo tras haber agotado este trámite podrán pasar a la demanda de gracia ante el jefe del Estado centroafricano, el general André Kolingba, único con poder para perdonar al ex emperador.Los observadores consideran que el difícil ballet que a lo largo de seis meses ha mantenido este proceso en el filo entre lo político y la voluntad de un fiable ensayo general de las nuevas instituciones democráticas se encaminará ahora hacia las intervenciones diplomáticas. En efecto, se espera que jefes de Estado africanos que fueron amigos de Bokassa cuando reinaba en Bangui -entre ellos los de Gabón, Zaire y Costa de Marfú, Omar Bongo, Mobutu Sese Seko y Houphet-Boigny, respectivamente- presionen próximamente a favor de la no ejecución de Bokassa.

Temores

En los pasados días se temía que el veredicto desencadenara brotes de violencia por parte de los simpatizantes de Bokassa -en caso de una sentencia negativo de los afectados por sus desmanes en la época del terror, ante una eventual absolución.

"Este juicio no va a traer nada bueno porque a lo largo de estos seis últimos meses se han desenterrado muchos rencores que estaban olvidados y los odios han calentado la cabeza a mucha gente", decía ayer un centroafricano. La tensión se ha visto acentuada por a reciente detención de varios testigos en el proceso, miembros de la tribu de ex emperador Bokassa I, la mbaka.

"Está bien que lo hayan condenado por que ahora podremos ir por el mundo con la cabeza alta y la seguridad de que nuestro país no es una entelequia exótica, sino una realidad con unas instituciones que Funcionan", declaraba una mujer en Bangui. 'Pronto tendremos elecciones, y lo pasado, pasado está; la sangre sólo llama a la sangre", añadía, al manifestarse favorable a la condena del ex emperador, pero contraria a su ejecución.

"Hizo muchas cosas malas, pero es un jefe", afirmaba otro ciudadano de la capital. Un tercero se limitó a contestar según su credo: "Sí, está bien que lo hayan condenado. Como dice la Biblia, quien hace el mal pagará con mal[", explicaba.

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