La policía peruana recupera un pueblo en manos de hombres armados

La policía peruana recuperó ayer, en medio de una gran expectativa nacional, el control de una localidad selvática, al norte de Perú, que durante siete días permaneció en poder de hombres armados. Oficialmente no se ha aclarado si los ocupantes del pueblo eran narcotraficantes, terroristas o narcoterroristas.

La localidad de Uchiza, perdida en la verdura selvática, fue tomada el pasado lunes, 1 de junio, por un grupo numeroso de hombres armados -inicialmente calculados en 300- que, a lo largo de siete horas de combate con 26 agentes del cuerpo policial del lugar, dominaron el pueblo. El resultado del enfrentamiento fue de seis policías muertos, al igual que cuatro pobladores y un número indeterminado de atacantes, destrucción total de los locales públicos y la instauración de la independencia lugareña sin autoridades.

Los invasores, ahuyentados

Ayer, después de la conmoción nacional que suscitó el caso, la policía devolvió a Uchiza la normalidad institucional. A las dos de la tarde desembarcaron de un avión Antonov 100 policías, y los vuelos rasantes de dos helicópteros artillados, sin efectuar un solo disparo, consiguieron ahuyentar a los invasores.Uchiza, situada a 500 kilómetros de Lima, en plena selva amazónica, es reconocida nacionalmente como bastión del narcotráfico, y a lo largo de la situación que se vivió la semana pasada salió a flote la existencia de una alianza, aún contradictoria y polémica, entre narcotraficantes y guerrilleros de Sendero Luminoso. En la noche del domingo, la televisión peruana mostró un reportaje sobre la situación de Uchiza, que demostraba, en parte, la citada alianza.