El 70% de los padres desconoce las alteraciones de espalda de sus hijos

El 2% de los niños en edad escolar presenta desviaciones en la columna vertebral de tipo escoliótico. Por lo menos un 10% de ellas será progresiva, según un estudio realizado en Madrid. En esta ciudad existe una población escolar de 160.000 escolares, de ellos 2.600 tienen alteraciones escolióticas, 260 de las cuales precisarán tratamiento por su intensidad. El 70% de los padres con hijos en edad escolar desconoce que sus hijos padecen estas anomalías, por lo que no son tratados debidamente. Los 11 y 13 años son las edades más frecuentes en que aparecen desviaciones de columna (escoliosis o cifosis), y existe el peligro potencial de agravamiento hasta los 16 o 17 años.

La detección precoz de las desviaciones de columna se ha revelado como una práctica muy rentable, dado el escaso coste económico, los beneficios que reporta y el poco tiempo empleado en las revisiones. En cada exploración se tarda unos 30 segundos, con lo cual se puede ver hasta 120 niños por hora, y la puede realizar una enfermera o personal entrenado del colegio o del centro, que posteriormente remitirá los datos al traumatólogo de los niños a los que se considere necesario realizar un estudio posterior.

Se calcula que un 3% de los chavales precisará tratamiento ortopédico rehabilitador. Las mejores edades para detectar y corregir una alteración son los seis años o, posteriormente, entre los 11 y 13. "Las alteraciones en la alineación de la columna son frecuentes en la edad escolar; el problema es determinar si son cuestiones de hábitos posturales o proceden de alteraciones esqueléticas", explica Jon Asolo, pediatra en un centro de promoción de la salud dependiente del ayuntamiento.

Posturas

"La postura puede influir en la intensidad de estas curvas normales, pero en los escolares es frecuente que se deban, por un lado, a vicios posturales de diversa índole, pero también al poco desarrollo de la musculatura vertebral, y esto es más evidente en la adolescencia y preadolescencia. Una gran parte se recupera cuando finaliza el crecimiento, sin necesidad de ejercicios de rehabilitación especial, solamente con una actividad deportiva normal para su edad", añade Asolo.Las alteraciones de columna más frecuentes en los escolares son las que se denominan idiopáticas, es decir, que no se sabe la causa de la deformidad ósea y se presenta entre los uno y 10 años de edad. En su aparición interviene una interacción de varios factores y una predisposición genética. De hecho, las niñas se ven afectadas con mucha mayor frecuencia que los niños (una proporción de ocho niñas por un varón), y es más usual en los hijos de padres con alteraciones escolióticas. La gravedad de la alteración depende de la intensidad de la desviación: curvas pequeñas, de entre 10 y 15 grados, no suelen necesitar tratamiento ortopédico.