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Tribuna:LAS ELECCIONES DEL 10 DE JUNIO / MADRID
Tribuna
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Un minuto de reflexión antes de la jornada del 10-J

Si hay algo que me preocupa, y me ocupa, es el futuro de Madrid, y especialmente de los más de tres millones de madrileños encomendados a la gestión del municipio. Sé que un porvenir mejor, más próspero, más alegre y más humanista pasa por la cooperación de todos, sin excepciones, o ese porvenir no se dará, al menos con las características que soñamos. Por ello me preocupa el tono adoptado por algunos candidatos en este tramo final de la campaña electoral, lejos de la concordia que deberá presidir necesariamente nuestras relaciones después del 10 de junio.En ocasiones he dicho, y lo reitero con toda sinceridad, que todos los programas que concurren a estas elecciones municipales tienen al menos alguna sugerencia estimable, digna de estudio detallado. Pero también es cierto que algunas propuestas contienen un cierto sonido demagógico, irreal, propio de quien quiere captar votos por encima de otros fines. Ello me lleva a la conclusión de que acaso algún candidato piense en Madrid no como un objetivo en sí mismo, como algo por lo que hay que luchar y trabajar, sino como un peldaño, como un trampolín hacia conquistas de o´tras cotas de poder.

Creo que en esta recta final de una campaña que en ocasiones se ha presentado excesivamente dura todos debemos pararnos a meditar unos segundos: Madrid es una meta que merece la pena, entre otras cosas porque su gobierno implica la canalización de tres millones largos de sueños, esperanzas y anhelos. De ninguna manera podemos defraudarlos, dejándonos ganar por una política que así, con minúsculas, sólo busque la satisfacción de ambiciones personales o la revancha por frustraciones que hace tiempo deberían haber quedado olvidadas.

Serenidad

Por eso quiero, como alcalde y como candidato, hacer un nuevo y final llamamiento a la serenidad que propicie un debate de altura sobre ideas, enfrentadas unas veces, pero no necesariamente excluyentes en la mayoría de las ocasiones. Estoy convencido de que el porvenir de esta ciudad pasa por una cooperación en el inmediato futuro, sin que tal cooperación signifique renunciar a la crítica constructiva ni a la confrontación de puntos de vista.

Se trata de propiciar entre todos el, establecimiento, de una vez y para siempre, de unos cauces de tolerancia, y hasta me atrevería a decir de fratemidad, en las relaciones ciudadanas. Estoy convencido de que solamente así llegaremos a esa ciudad. abierta, acogedora y verdaderamente merecedora de convertirse en la capital de la cultura europea. De la misma manera, será entre todos como consigamos hacer de nuestra ciudad una capital próspera y más habitable, que pueda ser considerada por los madrileños y por quienes nos visitan como una prolongación de su hogar. Desde la experiencia de un mandato anterior ya hemos puesto las primeras piedras hacia este futuro: Campo de las Naciones, Ciudad de las Ciencias del Niño, Capital Cultural Europea en 1992.

Pero personalmente insistiré, sean cuales fueren los resultados electorales, en tender mi mano al acuerdo con todas aquellas fuerzas democráticas y progresistas cuyo fin último consista en hacer un Madrid mejor, más próspero, más rico y más justo.

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Pienso que nos encontramos ante una oportunidad histórica para, continuando por el camino trazado, llegar a construir una ciudad de la que nos sintamos orgullosos y en la que nuestros hijos lleguen a ser más felices que nosotros, en la que encuentren nuevas oportunidades y nuevas fuentes de riqueza.

La ciudad que queremos

Que nadie piense que pretendo ofrecer una visión idílica del futuro; conozco, acaso mejor que nadie, las dificultades y los obstáculos -hoy menores que en el pasado- que se alzan en nuestro camino. Por eso mismo, sé que no será alzándose contra la obra del adversario político como se llegará a construir esa ciudad que todos queremos.

En esa obra quizá no debamos estar todos revueltos, pero sí habremos, cada cual en su puesto, de estar juntos.

Juan Barranco es alcalde y candidato del PSOE al Ayuntamiento de Madrid.

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