El presidente de la Audiencia de Madrid critica duramente el funcionamiento de la justicia

Clemente Auger, presidente de la Audiencia Territorial de Madrid, considera que la tutela judicial que prestan las instituciones de la justicia no es efectiva ni satisfactoria, según se desprende de la memoria de 1986 del citado organismo, de la que Auger ha sido ponente. El titular de la Audiencia Territorial critica duramente la ley Orgánica del Poder Judicial, a la que calificó repetidamente, en un encuentro con periodistas, como "un verdadero desastre".

Según la memoria, que refleja el sentir de la sala de gobierno de la Audiencia Territorial, se ha "generado un desprestigio del servicio público de la Administración de justicia de este territorio, sentido y sufrido por los ciudadanos, que hace peligrar la cultura democrática de los mismos y que cuestiona uno de los fundamentos del Estado de derecho".En opinión del ponente, las causas que han originado ese desprestigio son "los cambios de residencia de la población; el desarrollo, atravesado de crisis económico- social; la inadecuación de procedimientos; la falta de confianza de los ciudadanos respecto de las resoluciones judiciales; la necesidad de control, en los casos de conflictos con los ciudadanos, de las administraciones públicas y la desconfianza de éstas acerca de ese control, fundada o infundada; la continua movilidad de los titulares de los órganos jurisdiccionales y la falta de éstos en destinos de suma importancia".

Afrontar el problema

La memoria señala que la verificación de ese estado de opinión no debiera tener más consecuencia que afrontar el problema, buscando soluciones y huyendo de sentimientos de autoinculpación o de acusaciones genéricas infundadas."Ante la extrema dilación en la resolución de las cuestiones que se someten a la consideración de los jueces y tribunales", agrega Auger, "no puede por menos de comprenderse la necesidad urgente de atender ese sentimiento generalizado de insatisfacción y de comprender lo fundado del mismo".

El presidente de la Audiencia Territorial achaca el origen del problema a la estructura y modelo judicial diseñado en la ley Orgánica del Poder Judicial, a la que considera excesivamente conservadora para este tiempo. Auger estima que se necesita una ley revolucionaria que cambie por completo el sistema de hacer justicia, un cambio al estilo del que supuso en el siglo XIX la anterior ley. "Aquélla se tuvo que modificar a los 10 años por ser demasiado progresista", añadió Auger, "y ésta se tendrá que cambiar por ser demasiado conservadora".

Desde su punto de vista, la modificación deberá incluir los aspectos del procedimiento, para agilizarlo, y los gubernativos.

Auger precisa que el único mérito de la ley Orgánica del Poder Judicial es que "significa la definitiva instauración, que no restauración, de un poder judicial independiente, indispensable en un Estado social y democrático de derecho".

Clemente Auger considera imprescindible un nuevo desarrollo legislativo para conseguir una justicia razonablemente rápida y eficaz y evitar la masificación de los juzgados y audiencias. Auger anunció que en los primeros meses de 1987 se ha producido un aumento espectacular en el número de sentencias y resolución de casos en la Audiencia de Madrid, pero que, a pesar de ese esfuerzo, a final de año habrá más de 1.000 casos nuevos, que irán aumentando sin remedio.

Sentencias y churros

"Esto no significa que se debe duplicar de nuevo el esfuerzo, porque no se trata de hacer sentencias como churros", agrega Auger, "sino estudiar los casos y trabajar con eficacia. Tienen que llegar menos casos a las instancias superiores, pues hay excesivo número de recursos. El ciudadano debe acostumbrarse a que su caso, le den o no la razón, se vea sólo una vez ante los tribunales".El presidente de la Audiencia Territorial considera muy importante potenciar la justicia de distrito, y criticó la ley Orgánica del Poder Judicial, que la ha hecho desaparecer.

Clemente Auger precisa que ,es un desatino eliminar a los jueces de distrito, con el cuadro de faltas tan extenso que recoge el Código Penal. Auger se refirió también a los casos de corrupción judicial, y señaló que la corrupción es un mal incrustado en todos los sectores de la sociedad y que el poder judicial ha tenido al menos la valentía de sacarlos a la luz.