Torre de Guerra

Hace muy bien el señor Guerra al encerrarse en su torre de marfil y atribuir su descenso de popularidad a la actitud hostil de la Prensa hacia su Gobierno. Seguro que la pérdida de un millón de votos en las pasadas elecciones también fue atribuible a tan perversa actitud. Personalmente, pienso que con el señor Solchaga tiene suficiente para perder otro millón en las próximas.Pero que no olvide el señor Guerra que mucha gente de izquierdas votamos a su partido, aparte por repugnancia visceral hacia las derechas, porque nos pareció la solución menos mala. Pero para próximos comicios nos queda el recurso de la abstención, y en las municipales se verán los resultados.

Lo que sí es casi seguro que el señor Guerra está en posesión de la absoluta verdad. Y el resto de los españoles somos unos pobres diablos que nos equivocanios en todo. Por eso estamos tan necesitados de un salvador Caudillo que nos guíe- .