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Bulgaria intenta duplicar su comercio con España antes de que termine esta década

Bulgaria, el país del Este más abierto al comercio -sus autoridades dicen que el mismo aporta un 80% de la renta nacional destinada a los nueve millones de habitantes-, tiene el objetivo, de duplicar los intercambios cón España antes de que termine esta década. Su ministro de Comercio, Jiristo Jristov, se entrevistó ayer con varios ministros y empresarios españoles. Fomentar las inversiones recíprocas, -evitar la doble imposición y suprimir las cuotas que atenazan las exportaciones búlgaras figuran entre sus propósitos más inmediatos.

Jristo Jristov, de 56 años, dirigió en el primer quinquenio de los setenta la política comercial con los países occidentales. Eran años en que disminuía la fuerte concentración del comercio búlgaro con el Este, que entre 1956 y 1980 llegó a bajar del 87% al 76%. Los intercambios con los países capitalistas, entontes estables en un 16,5%, luego han caído en los ochenta a poco más del 11 %, dentro de un volumen total que ha crecido a un ritmo anual del 10% en el período 1980-1985 y que tiene programado un 8% para el actual quinquenio. Jristov sumó a su jefatura del Comercio Exterior, el año pasado, la de Comercio Interior y Abastecimiento del Estado.Ahora, Jristov quiere abrir más la economía de su país al conjunto de Occidente. En la presente década considera que han sido superadas las dificultades surgidas: los ecos en Italia de la llamada pista búlgara tras el atentado contra el Papa, la congelación de contactos políticos por parte de Turquía durante los últimos dos años, y la inicial incidencia del accidente de la central nuclear soviética de Chernobil en el comercio con la República Federal de Alemania, su cliente más destacado, con el que ha estrechado vínculos en 1986.

Pero Jristov considera que las relaciones con España se mantienen en un nivel "insignificante" (10.000 millones de pesetas al año, cifra que un allegado al ministro comenta como más baja que la de Portugal), por lo que se ha fijado el objetivo de elevarlas en pocos años desde los actuales 75 millones de dólares a 150 o 200.

Para sentar las bases de la cooperación bilateral a largo plazo con España, el ministro búlgaro se ha entrevistado estos días y ha promovido acuerdos con la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE), tres ministros españoles y altos cargos de Comercio. A estos contactos sumará a partir de hoy otros con el presidente de la Generalitat de Cataluña y representantes empresariales.

Mayor apertura

Tras ampliar en 1986 las normas sobre inversiones extranjeras y poner en marcha este año medidas de descentralización económica como las soviéticas, el Gobierno búlgaro persigue abrir la gama del comercio con España, fomentar las inversiones mixtas en empresas comerciales e industriales, evitar la doble imposición, eliminar las cuotas españolas a algunas exportaciones (metales ferrosos, carretillas y montacargas) y colaborar en los sectores metal-mecánico, agroalimentario, turismo, telecomunicaciones, electrónica, informática y químico.Bulgaria ya tiene varias sociedades en España para montar estos vehículos. Ahora intenta trasladar la experiencia a los pequeños motores eléctricos, otros de alta potencia para máquinas-herramientas, la metalurgia y la electrónica, sectores en los que se ha especializado dentro del Comecon.

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