Guerra: "Hay peligro de que el PSOE pierda la alcaldía de Madrid"

El vicepresidente del Gobierno, Alfonso Guerra, ha mostrado en los últimos meses su preocupación por la eventual pérdida de votos del PSOE en la próximas elecciones municipales. "Existe el peligro de perder alguna alcaldía, como la de Madrid", manifestó durante una reunión del comité federal del partido. Igualmente se refirió a "la importante crisis de crecimiento del partido" y a la posibilidad de que la ruptura de Coalición Popular facilite "el salto de Blas Piñar", que fue presidente del partido ultraderechista Fuerza Nueva, ya desaparecido. Estas impresiones, junto a otras del secretario general, Felipe González, y del secretario de organización, Txiki Benegas, fueron expuestas en los dos últimos comités federales del PSOE, según las actas de las reuniones, a las que ha tenido acceso EL PAÍS.

El Comité Federal del PSOE, máximo organo del partido entre congresos y compuesto por 162 personas, se ha reunido dos veces desde las elecciones del 22 de junio, y está prevista una nueva sesión para finales de este mes. Estas reuniones se realizan a puerta cerrada y, de su contenido nada trasciende, ya que el comunicado oficial que se difunde no refleja los debates. Posteriormente se elabora un acta.El pasado 11 de julio, el vicesecretario general del PSOE hizo un análisis de los resultados electorales por provincias y mostró su preocupación ante las próxi mas municipales y autonómicas; y se refirió especialmente al caso de Madrid.

"En las elecciones municipales es necesario tener en cuenta el candidato municipal, existiendo el peligro de perder alguna alcaldía como la de Madrid", dijo Guerra, según recoge el acta: "Lo más preocupante es sin duda el descenso que se ha experimentado en Madrid", continuó el vicepresidente, "no sólo en la capital sino en las ciudades del cinturón industrial, de voto tradicionalmente socialista".

Después de estas apreciaciones ofreció a los miembros del comité federal un dato reconfortante para ellos. Según los datos de Guerra, la fuga de votos socialistas a otras formaciones políticas no se traducirá en concejales para estas últimas, ya que en ningún caso alcanzarán el 5% exigido por la ley electoral para obtener ediles. El presidente del Gobierno, Felipe González, dijo en la misma reunión: "Es, muy bueno que el análisis de los resultados electorales se realice territorialmente y por zonas, para saber por qué se está fallando".

Los tres intervinientes -González, Guerra y el secretario de organización, José María Benegas- hicieron numerosas referencias al partido. El concepto de unidad y disciplina se cita reiteradamente como elemento que explica el éxito electoral del PSOE, y Felipe González apuntó la posibilidad de que en 1990 alcance los resultados de 1982. "Yo creo que de aquí al 90 cabe la posibilidad de recuperar electorado y de situarse otra vez en el 82; incluso de romper lo que ha podido ser el 82, hacia arriba".

El secretario de organización, Txiki Benegas, destacó la solidez del partido, aunque llamó a una reflexión: "Existen bajas elevadas que afectan a compañeros con poco tiempo en el partido, por lo que es necesario reflexionar sobre ello". Benegas destacó la crisis de la derecha, "que repercute en la vida parlamentaria y propicia que grupos como el CDS y otros mantengan una actitud asamblearia en el Parlamento". Según. la misma acta, Benegas concluye: "La crisis de la derecha puede hacer que Blas Piñar dé el salto al estilo de Le Pen en Francia".

Estudios sociológicos

En la reunión'del comité federal del pasado 31 de octubre Alfonso Guerra comunicó la existencia de "grupos de trabajo" en todas las organizaciones del PSOE. "Es necesario consolidar la organización del partido, y la ejecutiva cuenta con distintos grupos de trabajo realizando estudios sociológicos de cara al 90 y que ya están muy avanzados". Guerra habló de la crisis de la derecha, y aseguró qu e todas las semanas recibía llamadas "de los secretarios generales de todos los partidos". "Se encuentran sin alternativa porque nunca creyeron en la necesidad del cambio de un régimen a otro, aunque existe un intento de recomposición interna de la derecha".Felipe González fue interrogado por miembros del comité federal sobre la situación de los jueces con respecto al Gobierno. González rechazó que hubiera enfrentamiento entre el Consejo General del Poder Judicial y el Ejecutivo, y aseguró que se trataba de "problemas de comportamiento de algunos jueces". Seguidamente, abordó la situación en el País Vasco.

"Los jueces de Bilbao iniciaron una diligencias por las declaraciones de Ramón Jáuregui [delegado del Gobierno] y al mismo tiempo dan a conocer un comunicado. Si hubieran realizado con anterioridad comunicados cada vez que. aparecen declaraciones ilegales de Herri Batasuna sería explicable, pero sólo lo hacen con el delegado del Gobierno".

"Así, por ejemplo, con los asesinatos de Brouard, Yoyes o el compañero Casas, que eran competencia de la Audiencia Nacional, se reacciona en sentido contrario, según afecte o no a Herri Batasuna. En elcaso del asesinato de Brouard aparece un fiscal que allí era respetable y que posteriormente es tachado de loco", comentó Felipe González a los asistentes en la reunión.

El presidente del Gobierno respondió a algunas dudas de miembros del comité federal socialista sobre la posición del Ejecutivo español respecto a Nicaragua. Dijo que se mantenía la solidaridad con los sandinistas, además de un deseo: "El proceso de Nicaragua es posible que sea reversible, y nosotros luchamos por ello pues apoyamos un proceso de socialismo democrático. Somos el único Gobierno de Europa que ha condenado la ayuda a la contra".