Sueldos crispantes
Pronto cobrarán los parlamentarios 220.000 pesetas de sueldo base, más 140.000 en dietas los residentes fuera de Madrid. Lo dijo la Mesa del Congreso. Cinco kilos y pico al año, contando dos pagas extras, claro. San Tierno se quitó la mitad del salario de alcalde y suben lo ya crecido en vez de bajarlo. Cualquiera pica o alquitrana en pleno julio. Y aún Martín Toval, portavoz del Grupo Parlamentario Socialista, ve poco altas las dietas para quien deba pagarse comida y cama en Madrid 16 días al mes, cuando familias enteras pasan con la tercera parte de las 140.000. Era yo el sumo plácido leyendo la Prensa y me quedé sin tranquilidad al topar con la barbaridad. No hay voluntad para zurcir el tremendo boquete del déficit público mediante austera aguja. Así no se anda con crisis a cuello. Mal sino me veo. O me clavo en Congreso a cobrar el exceso o la miseria me hará puro hueso.Felicidades, Félix Pons y señorías. Gran regalo de Reyes. Tienen ustedes tanto móvil para cantar y silbar como los tres millones de parados y los cinco de pobres para llorar sin cesar. Ahora entiendo por qué hay tanta cola para enrolarse a diputado, por qué Guerra pasó de sumo serio a gran risueño y por qué la bella Tocino de apé dijo que dejaría el escaño y lo mima como a su bebé. Ni siquiera Fraga se fuga de él. Imposible soltar la veta de oro. Y eso que mucho escañista resulta igual ornativo que la estatua del Retiro.-
