Pujol manifiesta que intentaron destruirle con el 'caso Catalana'
El presidente de la Generalitat, Jordi Pujol, manifestó ayer en la clausura de la fiesta anual de Convergència Democràtica (CDC) que habían intentado destruirle con el caso Banca Catalana y que lo que más le tranquilizaba era que "no podrían hacerlo nunca más".Pujol atacó al Gobierno socialista, al que responsabilizó de la presentación de la querella. Sin embargo, en muchos pasajes fue conciliador y reconoció un cambio de actitud en el PSOE. Habló con dureza del pasado, con cautela del presente y con esperanza del futuro. No olvidó recordar al Gobierno que "por cada paso que dé yo estoy dispuesto a dar dos".
Dijo que no pretendía la exaltación de los asistentes (25.000, según los organizadores) y les advirtió: "Que nadie quiera tomarse la justicia por su mano, pues nadie ha padecido más que yo con la querella". Finalmente añadió, aludiendo al caso Catalana: "Nos han puesto difícil el equilibrio, la serenidad, la magnanimidad".
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