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TRIBUNALES

Una mujer denuncia al juez que llevaba su querella contra mandos de la Guardia Civil

Francisca Vázquez Pino, que se querelló contra los mandos de su esposo, el guardia civil Juan García Monje, ha presentado denuncia contra Gustavo Solaz Lita, titular del Juzgado número 7 de Instrucción de Valencia, encargado de tramitar esa querella, y Pedro José Poyatos Ruipérez, fiscal adscrito al juzgado, por presuntos delitos de coacciones y vulneración del secreto profesional de la abogacía y del principio de legalidad y demás normas constitucionales.

La denuncia ha sido remitida al Tribunal Supremo. El asunto ha sido puesto en conocimiento, igualmente, del Consejo General de! Poder Judicial (CGPJ), la Fiscalía General del Estado y Amnistía Internacional.Los hechos denunciados se produjeron el pasado 23 de octubre, día en que Francisca Vázquez acudió al juzgado con el fin de ratificar la recusación que había presentado contra el juez Solaz.

El motivo de la recusación era la amistad íntima que el juez, según la mujer, dijo tener con el general Alvaro Casado Mestre, que ha sido jefe de la Tercera Zona de la Guardia Civil, con sede en Valencia, y que es uno de los mandos querellados. La ley orgánica del Poder Judicial estipula que la amistad íntima es causa de recusación.

Según la denuncia, Francisca Vázquez fue llamada al .despacho del juez, que dispuso que su abogado, Ramón Milara, quedara fuera de la habitación sin poder asistirla. El escrito precisa que, en presencia del fiscal, del secretario y de un oficial del juzgado, el juez preguntó a la mujer "si sabia con quién se jugaba los cuartos" y "si estaba segura de que había manifestado si era o no amigo íntimo del general Casado".

La denunciante se ratificó en el acto de recusación, "que se convirtió en un interrogatorio". Siempre según la denuncia, el fiscal Poyatos preguntó si la iniciativa había partido de ella o de su abogado, "lo que vulnera el sagrado secreto profesional de la abogacía". La mujer narra que durante este acto el juez se dirigió a ella "de forma violenta" para indicarle que se quitara las gafas y le mirara a la cara.

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