Algunos grandes bancos hacen dotaciones para las pensiones de los trabajadores en activo

Algunos de los grandes bancos nacionales que ya han contituido los fondos necesarios para hacer frente a las obligaciones de complemento de pensiones para con sus trabajadores jubilados han iniciado en este ejercicio la constitución de fondos especiales, destinados a cubrir las contingencias futuras de los trabajadores que todavía están en activo, pero que tienen derecho, en virtud del convenio colectivo vigente, a que las instituciones financieras les complementen las pensiones en el momento de su jubilación. El Banco Español de Crédito y el Hispano Americano son los dos grande bancos que andan más retrasados en la constitución de los fondos de pensiones.

El Banco de España, como entidad tutelar de las instituciones financieras privadas, sacó a medias del pasado mes de septiembre una circular por la que obliga a bancos y cajas de ahorro a íntroducir en sus contabilidades los fondos necesarios para hacer frente a los compromisos de complemento de pensiones con los trabajadores ya jubilados.La circular establece un plazo -hasta finales del próximo ejercicio- para que estos fondos estén constituidos en su totalidad. Las cantidades necesarias por cada institución deben calcularse con una rentabilidad máxima del 11%, y se admite la posibilidad de un plazo más prolongado para algunas entidades que se encuentren en circunstancias especiales.

La circular del Banco de España ha tomado carta de naturaleza y de obligatoriedad cuando buena parte de las entidades financieras ya había resuelto el problema al constituir los fondos necesarios. En medios del sector se señala que aproximadamente un 40% de los bancos privados españoles tiene en estos momentos constituidas; al ciento por ciento las provisiones suficientes para hacer frente a estas obligaciones. Un 30% tiene recursos destinados a este fin por un importe que cubre el 75% de las necesidades calculadas, y a finales de este ejercicio ya lo estarán al ciento por ciento.

El resto, entre los que se encuentran dos de los siete grandes bancos, ha destinado en los últimos años cantidades mucho más pequeñas para el aseguramiento del complemento de pensiones, realizándose el pago de las cantidades adeudadas en cada ejercicio con cargo a los resultados obtenidos cada año.

La decisión que alguno de los grandes bancos nacionales ha tomado de empezar a destinar parte de sus resultados de explotación a la constitución de un fondo que garantice el cobro de las pensiones futuras de los trabajadores que todavía están en activo, aunque recomendada por la circular del Banco de España, plantea problemas políticos y fiscales para quienes lo estén haciendo.

Política y fiscalidad

En primer lugar, la patronal bancaria, como representante de las entidades privadas, trata, en los últimos años, de lograr que los sindicatos representativos del sector acepten, como poco, el recorte de pensiones legislado por el Gobierno, y en último caso querría que desapareciera el compromiso que actualmente existe para futuras jubilaciones. Que uno o más bancos estén haciendo dotaciones para posibles complementos de pensiones viene a representar que, en el fondo, esta reivindicación patronal se considera prácticamente imposible de obtener.Por otra parte, mientras que los fondos destinados a garantizar las pensiones de los ya jubilados tienen reconocida la exención fiscal por el Ministerio de Economía y Hacienda, lo mismo que ocurre con las provisiones que los bancos tienen que hacer para posibles fallidos o morosos, aquellos que se vayan a dedicar a hacer frente a una obligación futura, pero no cierta hasta que el trabajador no se jubile -porque puede modificarse la normativa del convenio colectivo y, por tanto, desaparecer-, no pueden gozar de las exenciones fiscales en tanto no se apruebe la normativa legal sobre los futuros fondos de pensiones. Por ello, aunque algunos bancos vienen destinando cantidades crecientes de sus cuentas de resultados trimestrales a este fin, no lo dan a conocer de forma pública.

En medios próximos a la patronal del sector se señala que, de todas formas, el problema de fondos para hacer frente a las posibles contingencias futuras es bastante menor del que se ha dejado traslucir en algunas ocasiones.

Mientras que algunos bancos hablan de que se necesitaría aproximadamente un billón de pesetas para asegurar los complementos de pensiones totales, en la Asociación Española de Banca se piensa que con una cifra cercana al medio billón, e incluso inferior, y en un período de tiempo que puede prolongarse hasta los 15 años, sería más que suficiente.

El proceso de hinchar las cifras, se señala, puede obedecer a un intento de magnificar el problema "y que sean otros los que lo solucionen, dada su importancia", o a tratar de conseguir mejoras fiscales, dada la elevada cantidad de dinero en juego.