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Urbanismo califica de "muy grave" la realización de unas obras sin licencia en Peñalara

El director general de Urbanismo de la Comunidad de Madrid, José María Arranz, afirmó ayer que las obras realizadas en el enclave conocido como circo de Peñalara, donde se asienta la laguna del mismo nombre, pueden calificarse como de muy graves, dada la importancia del lugar. Se da el caso de que el circo de Peñalara, junto con la Pedriza y el hayedo de Montejo de la Sierra, son las únicas zonas naturales de la regían que gozan de protección legal desde 1930.Las obras en cuestión, según los datos de la Dirección General de Urbanismo, son la apertura de una zanja de unos 250 metros de largo, la excavación de tierras alrededor de una de las lagunas menores a fin de ampliar su superficie y poder utilizarla posteriormente como embalse, el desvío del cauce de un arroyo para que vierta sus aguas en la citada laguna y un dique de unos 100 metros de largo, cuatro de alto y cinco de ancho.

Arranz declaró que las obras se realizaron sin licencia del Ayuntamiento de Rascafría. El alcalde de la localidad, Manuel Vázquez, no pudo ser localizado ayer, aunque Arranz comentó que el alcalde le había dicho días antes clue desconocía la existencia de las ebras, muy apartadas del casco urbano.

Arranz afirmó que se ha dado un plazo de 10 días al Ayuntamiento de Rascafría para paralizar los trabajos. En caso contrario, será la propia dirección general la que incoe el correspondiente expediente de paralización Arranz terminó diciendo: "El asunto es muy grave, hasta el punto que estamos estudiando si encaJaría dentro de los supuestos que definen lo que se denomina delito ecológico".

El director general confirmó que la Comunidad de Madrid es propietaria del 31 % de las acciones de Transportes de Montaña (Tramon), una de las cuatro empresas, junto con Cotos Sky, Prodemon y Stachys, responsables de las obras. El paquete de acciones fue comprado por la hoy desaparecida Diputación Provincial de Madrid y su gestión está encomendada a la Dirección General de Deportes. Fuentes de la Coordinadora Madrileña de Defensa de la Naturaleza han destacado el hecho de que la propia Adiministración autónoma no respete los valores ecológicos de la región.

Por su parte, fuentes de la empresa Tramon hicieron ayer público un comunicado en el que señalan que las obras denunciadas no son de urbanización ni están en la laguna de Peñalara ni son para la producción de nieve artificial. Según estas fuentes, se trata de obras de mejora para asegurar el abastecimiento de, agua a las actuales instalaciones de Valcotos, atender posibles emergencias por incendios y posibílitar el riego de las zonas sembradas, entre otros fines.

Las mismas fuentes añadieron que el presunto dique es sólo un terraplén que bordea parte de una charca situada a unos 700 metros de la laguna de Peñalara y a unos 200 metros de los telesquís. Añadieron que no se había solicitado licencia de obras por entender que, al no tratarse de construcciones ni de urbanización alguna, no era necesario hacerlo. Para el resto de las obras del proyecto -instalaciones de producción de nieve artificial, un garaje, una balsa de agua, dos telesillas y la mejora, de una zona de aparcamiento-, se solicitó licencia al Ayuntamiento de Rascafría el pasado 24 de abril.

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