Las eléctricas elaboran un documento sobre cuestiones pendientes solicitado por Industria
Los presidentes de las ocho principales empresas eléctricas se reúnen hoy en la sede de Unidad Eléctrica (Unesa) para preparar un documento que, fijando cada uno de los "temas pendientes" de negociación con el Ministerio de Industria, fue solicitado por su titular, Luis Carlos Croissier, en la reciente toma de contacto que tuvo con Juan Alegre Marcet, presidente de la asociación. La cuestión pendiente más próxima es el reparto del 2% de los ingresos por tarifas del fondo de saneamiento. Los criterios para el reparto del 1% restante (3% en total) fueron establecidos en el mes de julio.
El documento que las empresas previsiblemente dejarán listo hoy será entregado por el sector al ministro de Industria cuando se celebre, en el curso de los próximos días la primera reunión de trabajo entre ambas partes. Tanto Croissier como Alegre Marcel, perfilaron, en su primer encuentro formal, un mecanismo de trabajo basado en grandes líneas en el intercambio escrito de posiciones, respecto a las "cuestiones pendientes" de negociación.Por el momento, y en espera de que el Ministerio de Industria fije por escrito sus criterios concretos en relación a la continuación del proceso de saneamiento, la única cuestión dejada sin dilucidar por el anterior equipo se refiere, a la fijación de criterios para el reparto del 2% del fondo tarifario que la orden ministerial del 6 de marzo de 1986 vinculó a la presentación de los programas de ahorros en costes. Los programas están ya elaborados y se estudia ahora la posibilidad de repartir este fondo vía las propias empresas. El pasado 14 de julio, la Dirección General de la Energía ya fijó los coeficientes según los que se debía repartir la parte del fondo tarifario (1% de los ingresos totales) que correspondían a los denominados ajustes de auditoría del año 1984. Estos coeficientes eran del 54% para Unión-Fenosa, 24% para Fecsa, 17% para Hidruña, 2,33% para Enher, 1,1% para Hidrocantábrico y 1% para ERZ.
Otra cuestión que presumiblemente será incluida en el documento será la filosofía de aumento de tarifas, pero no la petición formal de incremento. El estudio técnico aún está sin elaborar y no se pretende entregar el mismo, según fuentes solventes, hasta finales de noviembre o primeros de diciembre. El estudio hará referencia, como es habitual, a la evolución seguida por los costes de las empresas en el ejercicio considerado.
No se descarta, según las mismas fuentes, que se aborde de nuevo el contrato de suministro de las empresas distribuidoras con Endesa. En medios del sector se considera que este contrato puede penalizar duramente la cuenta de resultados de los próximos años. Relacionado con esta cuestión, también se pretende abordar el impacto en el balance de situación de la entrada en funcionamiento de las nuevas instalaciones. Aquí se estudia la posibilidad de ampliar los plazos de amortización o el impacto en los primeros años del abono de los intereses intercalarios.
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