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Cartas al director
Opinión de un lector sobre una información publicada por el diario o un hecho noticioso. Dirigidas al director del diario y seleccionadas y editadas por el equipo de opinión

Objetores

Haciendo uso del derecho de rectificación regulado en ley orgánica 2/84, rectifico la información difundida por ese medio informativo el 1 de octubre de 1986, en el .artículo La represión de la objeción de conciencia, firmado por don Juan Carlos Rois Alonso y ,don Máximo de Diego Pérez.1. Se dice en el artículo que la única organización que se ocupa del tema de la objeción de conciencia es el MOC. Esto no es cierto.

El MOC quiere asumir un protagonismo en este tema que no le corresponde. El problema de la objeción de conciencia es tan amplio y plural que ninguna organización o movimiento puede apropiárselo.

La objeción de conciencia, como derecho fundamental de la persona que es, y que como tal está reconocido en nuestra Constitución, forma parte de organizaciones de carácter religioso, por ejemplo, Cristianos para la Paz, Juventud Obrera Cristiana de España, Juventud Obrera Cristiana de Andalucía, Iglesia Bautista Española, Iglesia Evangélica Bautista de Gracia, etcétera; colectivos de carácter civil: Promoción de Defensa de los Derechos Humanos, MOC, Asociación para la Objeción de Conciencia (APOC), etcétera; grupos políticos y culturales:: Fundació per la Pau, Asociación para las Naciones Unidas en España, Consejo de la Juventud de Madrid, Club de Amigos de la Unesco, Asamblea de Cantabria por la Paz y el Desarme, etcétera.

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2. El MOC desea fabricar mártires para darlos luego ante la opinión pública.

Basta leer el artículo que comentamos para darnos cuenta de que lo que pretende este movimiento es denunciar en los medios de comunicación la situación de víctimas de Algunos de sus miembros.

Nosotros no queremos víctimas ni mártires. Queremos ciudadanos que hacen uso por los medios que pone en.sus manos un Estado democrático y social de derecho, como proclama la Constitución.

3. La ley orgánica 48/84 es mala, por insuficiente. Por ello formulamos en su día nuestra queja ante el Defensor del Pueblo. Es decir, deseamos una ley más perfecta y que regule con más generosidad el tema de la objeción de conciencia.

Pero de ahí a decir que es una ley que no necesitan ni piden los objetores de España media un abismo.- Vicepresidente de la Asociación para la Objeción de Conciencia.

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