Candidatos de calidad

En el suplemento de Educación del pasado martes día 23 de septiembre, EL PAÍS se hace eco del discurso de clausura pronunciado por el ministro de Educación, José María Maravall, en el pleno extraordinario del Consejo de Universidades celebrado recientemente en Santander. Entre otras frases, se reproduce la siguiente afirmación del ministro, referida a los concursantes para futuras plazas de profesor numerario de universidad: "No tenemos en España hoy día suficientes candidatos de calidad".Considerando que esta frase generalizadora tiende a descalificar al profesorado no numerario y da una falsa imagen de la realidad universitaria, queremos hacer las siguientes puntualizaciones:

1. Es público y notorio que a las recientes pruebas de idoneidad, de cuyas irregularidades se hizo amplio eco la Prensa, no pudo concurrir un numeroso grupo de candidatos con el adecuado nivel de formación por impedírselo algunos requisitos administrativos. Hoy día, los tribunales de justicia están fallando a favor de las personas que recurrieron por esta causa, obligando al ministerio a convocar las comisiones correspondientes. No puede afirmarse en el caso de estos profesores, cuya cualificación es presumiblemente similar a la de los que accedieron a plaza mediante estas pruebas, que no sean "candidatos de suficiente calidad" sin agraviar a ambos grupos.

2. En la actualidad hay una gran cantidad de profesores en formación, contratados en fechas más recientes, a quienes se les va a truncar sus expectativas razonables de una futura. docencia universitaria por razones puramente coyunturales, ajenas a su valía y capacidad, a través de un plazo (septiembre de 1987) erróneamente establecido. ¿En qué datos objetivos se funda el señor ministro para hacer esa afirmación, cuando no da la oportunidad de mostrar su capacidad en concurso de mérito a quienes de ese modo descalifica? ¿Ha reparado el señor ministro en que estas personas tienen el mismo derecho que las futuras generaciones a que no se les tapone el acceso a la docencia y a la investigación? ¿O acaso deben ser sacrificadas a una decisión errónea varias generaciones?

Se puede decir que ambos grupos aquí aludidos vienen a constituir la casi totalidad de los profesores contratados.

Sería de desear que el señor ministro se retractase de esas palabras, que, difundidas por la Prensa, redundan en desprestigio, de toda la colectividad docente.- Portavoz de la Junta Ejecutiva de la Asociación Madrileña de Profesores Contratados de Universidad.

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