Cerrada la venta de la división inmobiliaria de Rumasa al grupo Heron Internacional
La operación de venta y reprivatización de la división inmobiliaria de Rumasa al grupo Heron Internacional-España, SA, que dirige Gerald Ronson, quedó cerrada al mediodía de ayer por 10.536 millones de pesetas. El importe de la operación se hizo efectivo mediante un talón del Banco de Santander contra el Banco de España.
El director general de Rumasa, Félix Díaz Burgos, manifestó que "es una venta que se ha hecho con especial cuidado, con absoluta profesionalidad y que se ha otorgado al mejor postor, por lo que realmente estamos muy satisfechos".Díaz Burgos manifestó a la agencia Europa Press que "en la operación de reprivatización nos han guiado criterios puramente económicos y de solvencia de los ofertantes. De esta manera, la comisión reprivatizadora aplazó su decisión hasta tener el convencimiento y garantías de que los adjudicatarios seguirán invirtiendo".
El director general de Rumasa indicó que tenían "el compromiso de Heron Internacional de seguir invirtiendo en España en el área más social de la vivienda por lo menos otros 30.000 millones de pesetas de una forma inmediata y otras diversas actuaciones".
Además de las Torres de Colón, valoradas en la operación en 4.200 millones de pesetas, Heron Internacional adquirió ayer un total de 196 activos entre solares, edificios y promociones urbanas y turísticas, propiedad de la división inmobiliaria de Rumasa. El intermediario de la operación, la sociedad Improasa, recibió ayer los 30 millones de pesetas correspondientes a la comisión previamente fijada.
La operación, que fue aprobada en Consejo de Ministros el pasado mes de septiembre, se instrumenta mediante la adquisición de la sociedad Vinar, en la que se han integrado las otras empresas que formaban la división inmobiliaria de Rumasa y las Torres de Jerez.
Los bancos del 'holding'
Por otra parte, el Consejo de Ministros de ayer aprobó el finiquito del contrato de venta de IDS bancos del grupo Rumasa. Esta decisión supone que la Adminstración puede recuperar ya los 40.000 millones de pesetas que estaban depositados en el Banco de Huelva para dar cobertura a los créditos otorgados por los bancos de Rumasa a terceros ajenos al grupo. El finiquito cubre la garantía que el Estado prestó sobre los balances de los bancos enajenados en operaciones de crédito, préstamo y descuento, así como eventuales fallidos y los avales prestados por los bancos.El Consejo de Ministros adoptó, el 27 de junio de 1984; el acuerdo para la enajenación directa de las acciones de los bancos del holding, mientras que el 31 de julio del mismo año la Dirección General del Patrimonio suscribió con los compradores el consiguiente "convenio obligacional".
El objetivo era sanear financieramente los bancos de Rumasa, para lo cual el Gobierno emitió deuda pública por un total de 440.000 millonés de pesetas, de los que depositó 40.000 millones en el Banco de Huelva.
El Consejo de Ministros aprobó ayer, además, la instalación en España del Royal Bank of Canada, una de las entidades extranjeras que tenían solicitado el permiso para operar en nuestro país. Entre los solicitantes figuran bancos japoneses.
