Dos horas en la Moncloa

Felipe González consum.ió ayer dos horas de "conversación", según su propia calíficación, con los medios ínformativos, que fueron convocados apenas unas horas antes para tratar "sobre asuntos relacionados con Iberoamérica". Naturalmente, el pretexto formal iberoamericano apenas fue tocado de pasada en la conferencia de prensa, excepcionalmente: celebrada en el patio de columnas deLa Moncloa.Fueron las cuestiones relacionadas con la OTAN y con el delicado momento que viven las relaciones Gobiernooposición las más tratadas en el encuentro.

González fue preguntado también sobre un sinfín de cuestiones, desde la inminente cumbre Reagan-Gorbachov en Islandia -dijo que ambos le han informado previamente sobre los asuntos a tratar y añadió que no cree en un resultado espectacular- hasta el rumoreado relevo del director general de RTVE, José María Calviño. Este último tema, considerado "cuestión menor" por el presidente, "no figura en el orden del día" del Consejo de Ministros de hoy y "no hay ninguna decisión adoptada al respecto. Pero, a continuación, sobre una posible sustitución en la presidencia de la agencia Efe, González señaló que "tampoco va a tardar mucho" la solución a este tema. González dijo carecer de información acerca del paradero del dirigente etarra Txomin Iturbe, y admitió que "es posible" que haya podido estar en Argelia, aunque no pudo confirmar este extremo. También admitió el presidente carecer de datos suficientes sobre el reciente viaje a Marruecos del asesor del Ministerio del Interior, el melillense Aoinar Mohamedi Dudú.

Las pretendidas divergencias entre el vicepresidente del Gobierno, Alfonso Guerra, y el presidente del Banco Exterior y ex ministro de Economía, Miguel Boyer, también fueron abordadas en la conversación con González, quien aseguró desconocer que haya "dos posiciones contrapuestas sobre política económica que enfrenten a dos sectores del partido".