Atentado en Colonia para protestar contra la política de Bonn sobre inmigración

Una bomba explotó en la noche del sábado en un edificio del Gobierno en Colonia, al oeste de la República Federal de Alemania. El atentado, que no produjo heridos pero sí daños evaluados en 200.000 marcos (cerca de 13 millones de pesetas), fue reivindicado por el grupo de extrema izquierda Células Revolucionarías (RZ), que afirma haberlo perpetrado para protestar contra la política oficial de control de la inmigración implantada recientemente por el Gobierno conservador-liberal.

El grupo hizo llegar ayer a una agencia de noticias en Bonn un comunicado, firmado con sus iniciales, RZ, y titulado Por un flujo (de emigrados) libre. Según los autores del atentado, el edificio atacado fue escogido porque alberga el archivo central de extranjeros, que es, según dicen, "racista y totalitario". El archivo, dice el comunicado, "contiene todo lo que saben los dominadores acerca de los no alemanes" que residen o han residido en Alemania Occidental.

El Gobierno de Bonn adoptó la pasada semana una serie de medidas, tanto legales como administrativas, destinadas a poner fin a la inmigración masiva de refugiados de países del Tercer Mundo. Ayer, un portavoz del Senado (ministerio) del Interior anunció en Berlín Oeste que durante agosto se recibieron 5.000 nuevas demandas de asilo, lo que elevó a 36.000 la cifra total en lo que va del año.