Los socialdemócratas de la RFA acuerdan abandonar la energía nuclear si conquistan el poder
El Partido Socialdemócrata Alemán (SPD) acordó ayer, por práctica unanimidad, un plan para el abandono de la producción de energía nuclear, como elemento fundamental de su oferta electoral ante los comicios en la RFA del próximo mes de enero. Con sólo dos votos en contra y una abstención, el congreso del SPD que se celebra en Nuremberg, demostró, con la aprobación de este plan, una sorprendente unidad, dado el carácter supuestamente controvertido, sobre todo en medios sindicales, del giro hacia una postura antinuclear. Johannes Rau, candidato socialdemócrata a la cancillería (jefatura del Gobierno), hizo suyo plenamente el programa nuclear aprobado por el congreso.
Dirigentes sindicales socialdemócratas anunciaron su pleno respaldo a la decisión del congreso, pero advirtieron de la necesidad de amplias reformas de la industria y la economía para evitar repercusiones sociales adversas.La aprobación del programa y el debate que la precedió demostraron que los socialdemócratas de la RFA tenían ya decidido incluir el abandono de la energía nuclear entre sus principales objetivos políticos y que sólo existen diferencias respecto a las fórmulas y el plazo necesario. El, giro de 180 grados registrado en la política del SPD en este campo, iniciado hace dos años, se consolidó tras el accidente de la central nuclear soviética de Chernobil, y supone, según la resolución aprobada, un cambio histórico.
El SPD considera que las esperanzas que se depositaron en decenios pasados en la producción nuclear como fuente energética del futuro se han visto frustradas y el riesgo remanente, pese a todas las medidas de seguridad, hace injustificable seguir apostando por esta fuente de energía. "Por primera vez en la historia, una tecnología debe ser desechada, en un abandono ordenado, a causa de sus peligros incontrolables", dice el documento aprobado.
En el plazo de 10 años, los socialdemócratas creen posible cerrar la última central nuclear en territorio de la RFA. En un plan inmediato para los dios primeros años de un hipotético Gobierno socialdemócrata se anularían todas las concesiones para nuevas construcciones, se paralizarían los proyectos de reciclaje de combustible nuclear y se prohibiría la exportación de centrales nucleares al exterior. En estos primeros dos años se cerrarían las centrales que ofrezcan menos garantías de seguridad. Las existentes deberían tener acreditada una solución final eficaz para sus residuos.
Estas medidas irían acompañadas de una profunda reestructuración del sistema energético, fomento del ahorro en la industria y consumo, con medidas políticas y un fortalecimiento del sector de técnicas de ahorro energético y construcción de centrales de bajo efecto contaminante.
El congreso del partido ha hecho asimism o un llamamiento a los municipios regidos por socialdemócratas a unirse inmediatamente a este concepto de abandono de la energía nuclear con la creación de fuentes de suministro eléctrico de carácter local. Para la realización de este plan, el SPD considera necsaria una cooperación entre el Estado, la industria y la sociedad, un amplio consenso y una mayoría parlamentaria.
Seguridad y defensa
Andreas von Bülow, experto en defensa, expuso ayer la política del SPD en materia de seguridad y defensa y reiteró la decisión del partido de retirar, si gana las elecciones, los misiles norteamericanos Pershing 2 y de crucero estacionados en la RFA. El SPD solicita de la URSS que haga otro tanto con los misiles estacionados en la RDA y Checoslovaquia, pero no como condición previa. También rechaza categóricamente la Iniciativa de Defensa Estratégica norteamericana (SDI) y exige un acuerdo para el cese de las pruebas nucleares.
El documento socialdemócrata ratifica el firme compromiso del partido con la pertenencia de la RFA a la OTAN y a la alianza con Estados Unidos. No se cuestiona tampoco la integración militar en el bloque. No obstante, exige reformas en la alianza que demuestren su unívoco carácter defensivo y que confirmen que, la distensión es el objetivo político prioritario de la OTAN.
Von Bülow presentó un concepto de defensa civil contra un eventual ataque oriental sobre la RFA con carros de combate, armas que, por la superioridad soviética, han justificado hasta ahora la presencia de misiles de corto alcance en territorio de la RFA.
El SPD propone también, como ya hizo el máximo dirigente soviético, Mijail Gorbachov, en su oferta de desarme convencional hecha en junio pasado en Budapest, la creación de un grupo consultivo permanente, integrado por militares y diplomáticos de ambos bloques y neutrales y no alineados europeos para resolver conflictos, crear confianza y vigilar la aplicación de las medidas de desarme.
El SPD aboga por dar un fuerte impulso a la ostpolitik con su nuevo concepto de seguridad compartida entre los países de ambos bloques El SPD considera imprescindible para ello que el pilar europeo en la Alianza Atlántica se refuerce y defienda los intereses de Europa oc cidental con más decisión que en la actualidad. El SDP se manifiesta también decididamente partidario de acuerdos regionales en el continente europeo, como son las zonas desnuclearizadas y libres de armas químicas, y aplaude la iniciativa de un corredor desnuclearizado desde Escandinavia hasta los Balcanes lanzada por la Comisión Palme.
